El Gobierno de Malawi tendrá que apretarse el cinturón financiero significativamente después de que los donantes anunciaran el jueves han retenido el apoyo presupuestario en respuesta al devastador robo financiero masivo en Capital Hill conocido como el cash-gate.
Según Sara Sanyahumbi, codirectora del Common Approach to Budget Support (CABS), los donantes, incluyendo el FMI y el Banco Mundial, en el marco del CABS dijeron el jueves que están reteniendo el apoyo presupuestario directo hasta que las investigaciones sobre el saqueo y el pillaje en Capital Hill fueran conclusas. Sanyahumbi comentó que «la línea ha sido cruzada y no hay vuelta atrás a la normalidad».
Las diferentes partes acordaron suspender el apoyo presupuestario hasta que se restablezca la confianza en los sistemas financieros del gobierno. Los donantes están furiosos por las revelaciones de fraude masivo y la corrupción en el gobierno.
El recién nombrado ministro de Hacienda, Maxwell Mkwezalamba, ha admitido que el saqueo masivo de las finanzas en Capital Hill ha erosionado la confianza de los donantes en Malawi. Mkwezalamba, quien ha pedido a los donantes que «ablanden sus corazones», declaró que el restablecimiento de la confianza por parte de éstos sólo sería posible si todas las filtraciones que permitieron el saqueo de los recursos públicos fueran selladas.
La Unión Europea y Noruega fueron los primeros en congelar sus paquetes de ayuda siguiendo los pasos de los informes sobre los saqueos masivos en el Gobierno.
Malawi, que depende de la ayuda para el 40% del presupuesto nacional, sufre el peor escándalo de fraude en el servicio público que al parecer ha mermado en más de 250 millones de dólares del dinero de los contribuyentes a través de dudosos desembolsos dudosa a empresas que no proporcionaban ningún bien o servicio.
Un equipo de auditoría forense del Reino Unido ha llegado ya a Malawi para ayudar al gobierno a investigar cómo millones de dólares fueron robados del sistema.
Nyasa Times