Un general libio disidente ha desvelado a las autoridades tunecinas un plan de sabotaje dirigido por la esposa del ex presidente tunecino, de acuerdo con el dirigente libio Mouammar Gadafi, justo un tiempo antes del principio de la puesta en marcha de la revolución libia. Este plan consiste en crear desorden y sembrar la desolación para detener la revolución tunecina infiltrando en los territorios tunecinos alrededor de 30.000 elementos armados, principalmente mercenarios.
Según lo que ha declarado a la prensa tunecina, el oficial disidente ha afirmado que la señora Leila Trabelsi estuvo en Trípoli durante la primera semana del mes de febrero y se reunión 3 veces con el líder libio para poner a punto su plan de sabotaje de la revolución.
En efecto, convinieron enviar 30.000 mercenarios para operaciones de sabotaje, de asesinato, y de violaciones, como las practicadas en regiones del oeste libio actualmente; y el oficial disidente añade que el líder libio tiene un rencor tenaz contra la ciudad de Sidi Bauzid, cuna de la revuelta popular y se habría comprometido bombardearla y sobre todo suprimirla del mapa utilizando armas de destrucción masiva.
Efectivamente, según el oficial, Gadafi desplegó al principio de la revolución libia miles de sus mercenarios en la frontera tunecina con el objetivo de sembrar desorden en los campos de los refugiados donde se habían concentrado miles de fugitivos de diferentes nacionalidades, pero en su mayoría libios, egipcios y bengalíes.
Las declaraciones del oficial libio vienen a corroborar las del primer Ministro del gobierno provisional tunecino señor Caïd BEJI ESSEBSI y del Presidente Fouad Mobazza quienes han confesado sus preocupaciones por la revolución tunecina frente al sistema de Gadafi, antes de la puesta en marcha de la revolución libia.
El señor Mobazza ha confirmado que el peligro en materia de seguridad sigue planeando sobre Túnez, ya que las autoridades están sometidas constantemente a los asaltos de los grupos armados que intentan infiltrarse a través las fronteras.
Por su parte, el primer ministro Caïd BEJI ESSEBSI ha informado de la situación peligrosa que prevalece en la frontera con Libia, que no cesa de bombardear el territorio tunecino, en particular los pueblos de la zona de Zahbya, lo que amenaza la integridad y la seguridad del país.
Hay que recordar que el líder libio dirigió un mensaje muy pesimista al pueblo tunecino, poco tiempo después la puesta en marcha de la revolución y la huida de Ben Ali, donde afirmaba su aversión contra la revolución y su apoyo y su simpatía hacia Ben Ali.
Según el señor Taoufiq Bouder Bala, presidente de la comisión de investigación sobre las violaciones y las transgresiones durante la revolución, es importante señalar que los bombardeos de las ciudades tunecinas sobre todo las que eran la punta de lanza de las revueltas populares, formaba parte del guion de Ben Ali, pero felizmente el ejército desobedeció las órdenes de Ben Ali de bombardear el barrio Azzouhour en Kasserine (oeste de Túnez) con aviones y carros para controlar las manifestaciones que pedían la salida del presidente.
Source journal algérien
Tomado de Ndjamena Matin, Chad, 22-06-11.
Traducido por Kaoutar Inchaallah, estudiante de Lenguas Extranjeras Aplicadas en la universidad de Lyon, colaboradora en prácticas con la Fundación Sur.