En su día, cuando todo el país añoraba la luz eléctrica para poder beber agua fría o conservar los alimentos en las neveras y congeladores, o seguir la radio , escuchar música en las viviendas; o conectarse a la red, aunque las páginas criticas al régimen son restringidas, no se sabe quien tuvo la ocurrencia de que el cementerio de Ela Nguema se ha de iluminar con bombillas mediante un grupo electrógeno potente.
Y en la semana pasada, nos aparecen inaugurando una fuente de agua potable, no se sabe realmente para quién; si para los difuntos que yacen en dicho cementerio, que antes de llegar donde se suponen que deben descansar en paz, vivieron con sed.O ésta fuente beneficiara a la ciudadanía que se encuentra viviendo alejados del cementerio y que no tienen agua corriente en sus barios y casas.
Pueda que el protocolo lleve ahí a “la Roja“ya que no quieren ni hacerse fotos con el anfitrión.Pero, ¿y la tumba del depuesto y asesinado presidente, Macias Nguema Biyogo,podrá ser localizada y visitada por los ilustres huéspedes?