La violencia desatada por la milicia fundamentalista Boko Haram desplazó este año a más de 2.500.000 personas en Nigeria, Camerún, Chad y Níger, advirtió hoy el coordinador humanitario de la ONU Toby Lanzer.
Según manifestó el experto a cargo de la situación en el Sahel, también las operaciones contra los terroristas han llevado a muchos seres humanos a abandonar sus hogares en la región.
Boko Haram intensificó en 2014 sus asesinatos y secuestros masivos, los cuales expandió del norte de Nigeria a otros estados de la cuenca del Lago Chad.
De acuerdo con Lanzer, los extremistas son además responsables de la destrucción de mil escuelas en esa zona africana.
Respecto a la situación humanitaria en el Sahel, señaló que la inseguridad alimentaria azota a 25 millones de personas, la quinta parte de ellas de manera severa.
Asimismo, lamentó que cada año mueran 700 mil niños por la malnutrición.
Las acciones de Boko Haram complica el ya adverso panorama imperante, dijo en un comunicado.
Prensa latina
(Fundación Sur)
