La universidad sudafricana de Witwatersrand (Wits), en Johannesburgo, vuelve a la tranquilidad al retomar hoy 28 de octubre sus actividades académicas tras más de 10 días de protestas estudiantiles.
Según una información de la cadena pública SABC, las reacciones son mixtas, pues parte de los alumnos dicen sentirse aliviados de que todo regrese a su curso normal, mientras otros insisten en continuar la campaña #FeesMustFall» (honorarios deben caer).
Fue en la Wits que comenzó el 14 de octubre la ola de movilizaciones de los estudiantes contra el anuncio de un incremento de los costos de las matrículas para el 2016.
El lunes, la Universidad dio a conocer un plan de nueve puntos con el cual hubo acuerdo, expresó la portavoz Shirona Patel, quien explicó que también se aplazaron los exámenes y se divulgará un nuevo calendario antes de finalizar la semana.
El resto de los centros también están volviendo a la normalidad. Sin embargo, los estudiantes de la Universidad Tecnológica de Tshwane permanecen desafiantes, indicó la televisora.
Marcharon al Banco de la Reserva (Reserve Bank) y al recaudador de impuestos en Pretoria la víspera. El campus permanece cerrado.
Por su parte, las universidades de Cape Town y Stellenbosch, en la provincia de Western Cape, suspendieron las clases por el resto de la semana.
El campus Mafikeng, de la Universidad de North West, ha sido escenario de continuas manifestaciones, pese al anuncio hecho por el presidente Jacob Zuma el viernes pasado de que no habrá aumentos de tarifas de ingreso a la educación superior el año entrante.
Hasta ayer en la mañana aún había disturbios en Mafikeng, cuando en las protestas se registraron enfrentamientos entre estudiantes y la policía.
Las movilizaciones en las universidades pusieron en el tablero público los problemas de la enseñanza terciaria en el país.
Para la mayoría de los participantes, lo ideal es hallar soluciones a largo plazo, lo que incluye un paulatino camino hacia la educación gratuita y de calidad para todos.
Prensa Latina
(Fundación Sur)