Filipe Sungo, rector de la Universidad Católica de Beira, afirmó durante la inauguración del año académico y la celebración del 30º aniversario de la institución, que “desde su fundación en 1995, la Universidad Católica de Mozambique ha respondido con rigor e innovación a los desafíos educativos, con la firme voluntad de formar ciudadanos íntegros […] No solo buscamos profesionales bien preparados y cualificados, sino también líderes comprometidos con el bien común».
A lo largo de estas tres décadas, la Universidad Católica de Mozambique ha consolidado un modelo educativo que destaca a nivel nacional por su excelencia científica, capacidad de innovación e internacionalización, sin perder de vista su profunda dimensión humana. Así lo ha subrayado la organización Médicos con África Cuamm, colaboradora de la universidad en diversas iniciativas, durante el acto celebrado el 14 de marzo en Beira. En la ceremonia han estado presentes Dante Carraro, cardiólogo y director de Cuamm, Alberto Mantovani, prestigioso inmunólogo y director científico de Humanitas, así como sacerdotes y representantes de la diócesis de Padua.
Dante Carraro ha definido la labor de la Universidad Católica de Mozambique como «una realidad fuertemente ligada a la comunidad», destacando que la ciencia, la investigación y la pericia deben estar siempre al servicio de los más vulnerables.
El profesor Mantovani, quien ha visitado Beira en varias ocasiones como docente invitado, ha resaltado la importancia de la formación académica:
«El futuro empieza aquí, donde se construye y se comparte el conocimiento».
Claudio Dalla Zuanna, obispo de Beira, presente en la ceremonia y recordando las palabras del Papa Francisco, ha expresado que «la universidad es ciertamente un lugar donde se cultiva la ciencia con seriedad y rigor, pero también es donde se forman los corazones y las mentes no solo para la excelencia académica, sino para el servicio generoso a la humanidad. La universidad no puede ser una torre de marfil cerrada en sí misma, sino que debe ser capaz de escuchar a la sociedad, aceptar desafíos y ofrecer respuestas».
La Universidad Católica de Mozambique es la segunda universidad más importante de Mozambique y se encuentra a unos 1.500 km. de la capital, Maputo. Su Facultad de Medicina nació gracias a la colaboración con Cuamm y las autoridades sanitarias locales, comenzando sus primeros cursos en 2004 con asignaturas como Anatomía, Cirugía y Medicina Interna, impartidas por médicos del Cuamm.
El 25 de agosto de 2007 se graduaron en Beira los primeros aspirantes a médicos, en lo que el entonces rector Alberto Ferreira calificó como «una fecha histórica para todo el país». Aquellos graduados fueron los primeros en formarse fuera de Maputo, en la zona centro-norte del país, donde en ese momento había apenas un médico por cada 100.000 habitantes.
Fuente: Agencia Fides
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