En África se encuentran localizados 15 de los 20 países con las tasas más altas de matrimonios infantiles. Esta campaña, de dos años de duración, tendrá como objetivo acelerar los esfuerzos para acabar con el matrimonio infantil en todo el continente.
Angelique Kidjo, Embajadora de la UNICEF, dijo: “juntos podemos hacer de África un continente sin matrimonios infantiles”.
Cada año, 14 millones de niñas están casadas antes de cumplir los 18 años, con consecuencias devastadoras para su salud, su educación y su bienestar.
En un esfuerzo por proporcionar un futuro a millones de mujeres y niñas, la Unión Africana ha puesto en marcha la primera campaña para poner fin al matrimonio infantil en África. La campaña, organizada en colaboración con la UNICEF y el UNFPA, se centrará en acelerar y potenciar este cambio a través de todo el continente, alentando a los gobiernos a desarrollar estrategias para dar a conocer los efectos nocivos del matrimonio infantil.
La campaña también tiene como objetivo apoyar las políticas y medidas que protejan los derechos humanos de las niñas, y para eliminar los obstáculos a la aplicación de ley .
La campaña reúne una variada red de asociaciones, entre ellas la Fundación Ford, la Comisión Económica de las Naciones Unidas para África (CEPA), Save the Children, Plan Internacional, Child Policy Forum África (ACPF) y el Departamento Inglés para el Desarrollo Internacional (DFID).
La Sra., Nyaradzayi Gumbonzvanda, Secretaria General de la Asociación Cristiana Femenina Mundial (YWCA), miembro de “Girls Not Brides” (Niñas, no Novias), fue nombrada Embajadora de Buena Voluntad de la Campaña para acabar con el matrimonio infantil en África.
El impacto del matrimonio infantil en las niñas africanas
El matrimonio infantil es una realidad para millones de niños, principalmente niñas, en toda África. El 39% de las niñas, en el África subsahariana, se casan antes de cumplir los 18 años y el 13% ya están casadas cuando cumplen los 15.
Las repercusiones de casarse siendo aún unas niñas las afecta a lo largo de toda su vida. El matrimonio a menudo marca el fin de su educación, limita sus oportunidades económicas fuera del hogar y las expone a la violencia física, sexual y emocional por parte de sus maridos.
El matrimonio infantil también amenaza los esfuerzos por mejorar la salud de las madres en todo el continente africano. Las novias, aún niñas, se enfrentan a un mayor riesgo de muerte y lesiones en el embarazo y en el parto, y en las niñas menores de 15 años las probabilidades de morir durante el parto son cinco veces mayores que en las mujeres de más de 20 años. Sus bebés también corren más riesgos, cuando una madre tiene menos de 18 años, su hijo tiene un 50% más de probabilidades de morir durante su primer año de vida que la de un bebé nacido de madres de mayor edad.
Los africanos están, por fin ahora, levantando sus voces en los medios de comunicación social en apoyo a la campaña.
La defensora de los derechos del niño y galardonada artista Angelique Kidjo, elogió la campaña de la Unión Africana: «Quiero aplaudir a la Unión Africana por lanzar una campaña para acabar con los matrimonios infantiles. Una campaña liderada por africanos y para africanos. Ahora tenemos que llevar este mensaje a cada pueblo, a cada familia, la gente tiene que estar convencida. [ … ] Juntos podemos hacer de África un continente sin matrimonios infantiles”.
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Nota de Fundación Sur: Para profundizar en esta temática aconsejamos la lectura del artículo de opinión escrito por Graça Machel en enero de 2013, titulado Para acabar con el matrimonio infantil tenemos que hablar más alto, con una sola voz.
