«¿Qué está ocurriendo en las conversaciones que se llevan a cabo en Doha sobre el futuro de nuestra región?». Con esta pregunta, la Oficina de Coordinación de la Sociedad Civil de Kivu del Sur ha expresado, en una nota recibida por la Agencia Fides, su preocupación por la falta de avances en las negociaciones.
En Doha, tras casi dos semanas de encuentros, no se ha logrado ningún progreso tangible hacia la paz en el este de la República Democrática del Congo (RDC). Las conversaciones entre la delegación de la RDC y los rebeldes del M23/Alianza del Río Congo (AFC) continúan a puerta cerrada, después de que venciera la fecha prevista para la firma de un acuerdo. «Por ello», señala la nota, «la sociedad civil se interroga sobre la eficacia de la mediación de Qatar». El documento añade que «el proceso de Washington también parece estancado», en referencia a los acuerdos suscritos el 27 de junio entre la RDC y Ruanda, señalada como patrocinadora del M23.
La sociedad civil lamenta, además, que las poblaciones del norte y sur de Kivu -las dos provincias donde el M23 ha conquistado amplias zonas- no hayan sido incluidas en las negociaciones: «Nunca dejaremos de reclamar nuestra participación en las iniciativas de paz en curso, porque mientras sigamos excluidos, la voz de la población no se tendrá en cuenta en los acuerdos… Esto también se aplica al Parlamento, legítimo representante del pueblo, marginado de todas las iniciativas actuales».
«El Gobierno debe informar con claridad sobre lo que ocurre en Doha para disipar malentendidos, porque la población tiene derecho a la información y a ser parte del proceso de paz en curso», reclama el comunicado.
El organismo con sede en Uvira, una de las pocas ciudades de Kivu Sur todavía bajo control gubernamental, advierte también sobre la difusión de noticias falsas en redes sociales destinadas a alimentar el odio tribal. Según la nota, esta «guerra digital» es alimentada tanto por el M23, que podría aprovechar el caos para intentar conquistar Uvira, como por sectores del propio aparato gubernamental, divididos por luchas internas en la cadena de mando militar.
La declaración concluye con un llamamiento al Consejo de Seguridad de la ONU «para que otorgue prioridad a la situación en la RDC y haga efectiva la aplicación de la resolución 2773». Dicha resolución, adoptada el 21 de febrero de 2025, reafirma el firme compromiso de Naciones Unidas con el respeto de la soberanía, independencia, unidad e integridad territorial de la RDC.
Fuente: Agencia Fides