Costa de Marfil celebrará la segunda ronda de las decisivas elecciones presidenciales el 28 de noviembre, una semana después de lo anunciado previamente, según ha declarado el primer ministro, Guillaume Soro.
Se espera que la votación termine con años de estancamiento político, que han ahuyentado la inversión en el mayor productor de cacao del mundo, desde la guerra civil que tuvo lugar entre 2002 y 2003, que dividió el país en dos, el sur controlado por el gobierno y el norte controlado por los rebeldes.
Los resultados de la primera ronda, celebrada en pasado 31 de octubre, dieron al actual presidente, Laurent Gbagbo el 38 % de los votos, y a su rival más cercano, Alsassane Ouattara, el 32 %, con una participación de cerca del 80 % de los marfileños registrados para votar.
“Por razones prácticas, técnicas y de equipamientos, la comisión electoral independiente ha pedido una semana más para preparar las elecciones, en las mejores condiciones posibles”, explicó Soro en una rueda de prensa.
El retraso vuelve a fijar la fecha en la inicialmente propuesta, antes de que se celebrase un consejo constitucional, durante el fin de semana, tras el cual, los observadores se mostraron sorprendidos ante la fecha propuesta del 21 de noviembre.
“Es bueno, si es para estar mejor preparado para las elecciones, pero, como hemos podido ver en Guinea Conakry, muchos retrasos pueden dar lugar a problemas”, declaró DaMina, un analista, refiriéndose a las tensiones que han aumentado en el país vecino de Costa de Marfil, en torno a las elecciones presidenciales, que finalmente tuvieron lugar el pasado domingo.
(IOL, 10-11-10)