El ejercito de la República Democrática del Congo (RDC) ha comenzado una nueva ofensiva en la ciudad de Beni, desde el sábado 13 de enero 2018, contra “las fuerzas democráticas aliadas” (ADF), un grupo rebelde ugandés culpable de haber asesinado a 15 soldados de la ONU hace un mes, así como a cinco soldados congoleños, y de haber herido a otros 53 soldados.
Esta ofensiva está coordinada por los ejércitos de la RDC y de Uganda, para derrotar al grupo rebelde que opera en la región del Kivu norte, una región muy rica en diversos minerales.
Diversos grupos rebeldes operan y controlan la región del Kivu, Norte y Su, al este de la RDC, que desde el fin oficial de la guerra entre 1998-2003, en la que millones de personas perdieron la vida, no ha conocido la paz todavía.
Desde que el presidente Joseph Kabila se negó a dejar el poder, al final de su mandato hace un año, la inestabilidad sigue apoderándose de la RDC.
El grupo islamista ADF sigue operando entre Uganda y la RDC y es responsable de innumerables masacres en la región de Beni. El ejército ugandés también ha lanzado ataques aéreos contra los rebeldes del ADF el mes pasado, pues operan desde la región montañosa del Ruwenzori.
Fuente: Reuters – Pambazuka News
[Fundación Sur]
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