El presidente de la República Democrática del Congo (RDC), Félix Tshisekedi, ha acusado a Ruanda de violar el acuerdo de paz firmado por ambas partes en Washington apenas hacía 24 horas. Según Tshisekedi, unidades del ejército ruandés han lanzado ataques con armas pesadas desde territorio ruandés hacia varias localidades de la provincia de Kivu Sur, lo que constituiría un quebrantamiento del cese al fuego.
Esta acusación se da en un contexto de nuevas y fuertes ofensivas del grupo rebelde M23, que, respaldado por Ruanda, está avanzando rápidamente hacia zonas estratégicas del este congoleño, provocando intensos combates, destrucción de viviendas y numerosos desplazamientos de la población. De hecho, se acusa a las fuerzas rebeldes de haber entrado en territorios cercanos a la frontera con Burundi, desafiando la tregua pactada. El gobierno de Ruanda ha rechazado las acusaciones y ha responsabilizado a la RDC y a las fuerzas burundesas de continuar los enfrentamientos en la región.
Las organizaciones internacionales insisten en que el reciente acuerdo, aunque visto como parte de un esfuerzo diplomático mayor, no contempla mecanismos sólidos de rendición de cuentas por los crímenes pasados en la región, lo que se convierte en un vacío problemático para lograr una paz duradera.
Fuente: Vanguard
[CIDAF-UCM]