Marie-Olive Lembe Kabila, durante su viaje al Vaticano, obtuvo del papa bendiciones especiales para los congoleños en general y para la comunidad católica en particular.
La primera dama de la República Democrática del Congo, invitó al papa Francisco a visitar su país, mediante una carta dirigida al soberano pontífice.
En la carta entregada por la primera dama congoleña, tras expresar la alegría “del mundo cristiano y el pueblo congoleño en particular” por la elección de Francisco para el pontificado, el 19 de marzo de 2013, la señora Kabila habla en nombre del pueblo congoleño, “al que represento” y le pide “humildemente” al pontífice que rece “oraciones de intercesión para una paz duradera en la República democrática del Congo”, dadas las atrocidades de toda clase sufridas desde hace décadas por la población, a causa de múltiples guerras injustas, focalizadas hoy en el este de la RDC, y que ocasionan pérdida masiva de vidas humanas.”
“Nuestro país, la República Democrática del Congo necesita una paz duradera para su desarrollo integral.”
“Es esta la motivación principal que ha animado el espíritu de mi esposo, el presidente de la RDC, Joseph Kabila Kabange, a convocar las concertaciones políticas actuales, después de tantos otros esfuerzos, sembrados de sacrificios, con el fin último de alcanzar la cohesión nacional.”
La primera dama de la RDC invita al santo padre a visitar el país, lo cual sería la primera ocasión en que visita este país un papa “voz de los sin voz, gran defensor de los pobres y de los oprimidos, para reconforar y dar esperanza a este pueblo de mayoría cristiana que desea vivir en la paz y la armonía que les lleve a un futuro mejor”.
La señora Marie Olive Lembe Kabila Kabange continúa con la promesa de construir en el Kivu Norte “una catedral dedicada a nuestro Dios y padre de la misericordia, que se convertirá en el lugar ideal de los fieles, que les permitirá encontrar consuelo ante nuestro señor Jesucristo, príncipe de la Paz”.
(Groupe L’Avenir, 17-09-13)