La policía sudafricana investiga un ataque con bombas incendiarias caseras perpetrado contra ciudadanos somalíes en la ciudad de Durban, provincia de KwaZulu-Natal.
El incidente ha provocado una ola de temor entre la comunidad extranjera de la región debido a un posible resurgimiento de las tendencias sociales xenófobas en el oriente del país.
En KwaMashu, al norte de Durban, los somalíes se están recuperando en un hospital después que su tienda fue incendiada el pasado lunes, un hecho que significó la segunda acometida violenta de este mes contra ciudadanos extranjeros en la zona
Testigos afirmaron que, en el momento del delito, los atacantes estaban gritando a las víctimas que «los extranjeros no eran bienvenidos aquí».
En un comunicado público, el alcalde de Durban, James Nxumalo, dijo que «es inaceptable que las personas destrocen propiedades y negocios de extranjeros debido a problemas con el nivel de competencia empresarial».
Entre 2003 y 2008, un total de 67 personas murieron en lo que fueron identificados como agresiones xenófobas en Sudáfrica. Los peores sucesos ocurrieron en mayo de 2008 cuando más de tres docenas de personas fallecieron por esa causa.
La propagación de la violencia comenzó ese año con una serie de disturbios en el municipio de Alexandra (noreste de Johannesburgo), cuando masas populares atacaron a emigrantes de Mozambique, Malaui y Zimbabwe, matando a dos e hiriendo a otros 40 extranjeros.
Fuente: Prensa Latina