Como es costumbre universal, la celebración del Día Mundial de la Mujer es un momento en el que el tema de las mujeres alcanza su puntp álgido, particularmente en lo que se refiere a la participación de las mujeres en los asuntos políticos, un campo todavía dominado por los hombres.
En Marruecos, el derecho de las mujeres para la participación en la vida política, sin discriminación alguna, es un logro que se remonta a 1962 con motivo de la promulgación de la primera Constitución del Reino. Un derecho consolidado a través de los textos básicos que se enmendó en 2011 con la institución de la paridad de género.
Un avance que se iniciió por la aplicación del principio de «discriminación positiva», que garantiza a las mujeres una cuota determinada. Sin embargo, persisten algunas restricciones en el camino de la verdadera promoción del papel político de las mujeres. Las restricciones relacionadas principalmente con los partidos políticos y los mecanismos dedicados a la realización de la igualdad de género como señalaron en declaraciones a la MAP, parlamentarios y activistas. Para Hasnaa Abu Zayd, parlamentaria y miembro del Buró Político del USFP, el primer punto a tener en cuenta en relación con los procedimientos en vigor dentro de los partidos políticos marroquíes que siempre han tenido dominación masculina.
La parlamentaria señaló que la convicción nacida alrededor de la necesaria participación de las mujeres marroquíes en la gestión de los asuntos públicos, lamentablemente, no se ha visto acompañada de un cambio sociológico real en las costumbres políticas. Consecuencia: la mujer se enfrenta a muchos imperativos invirtiendo entrar en el campo político
Para ilustrar estwe punto , se cita el ejemplo de los partidos socialistas de algunos países occidentales que consideran la condición de la mujer mediante la prohibición de las reuniones más allá de las 19.00 , para darle tiempo suficiente para cuidar su casa y la educación de los niños.
En cuanto a las mujeres elegidas que desempeñan responsabilidades comunales, se apunta a la persistencia de una cierta tutela sobre las mujeres, mientras se pide una participación real de las mujeres en la toma de decisiones y que se les de la oportunidad de acceder a posiciones de responsabilidad.
Esta es también la opinión de su colega de la cámara de Representantes, Amina Al Maa Ainine (PJD), que considera que a pesar de las disposiciones constitucionales que otorgan a la mujer una amplia representación, el hecho es que las mujeres luchan siempre para que prevalezca tanto dentro de sus partidos en la institución parlamentaria y los en consejos comunales. Ella no oculta su temor por la persistencia de esta posición degradante paradójicamente favorecida por la aplicación de la acción afirmativa y la lista nacional de la mujer. » Mientras las mujeres sean elegidas a través de una lista nacional, ellas nunca tendrán la facultad de imponerse con total independiencia ya que siempre serán responsables ante la dirección ds su l partido, » piensa ella sin ilusión. Otro testimonio, el de Milouda Hazeb, la única diputada presidenta de un grupo parlamentario (PMA), que piensa que las mujeres en la política como las mujeres activas en general sufren de los mismos problemas que les impiden hacer valer sus derechos y esto en Debido a la persistencia de una cierta cultura machista.
Aunque acoge con satisfacción los avances en derechos de la mujer, la lamenta, sin embargo, «una regresión en este capítulo durante los últimos tres años. » No obstante, se mantiene la confianza haciendo hincapié en que la realización de la igualdad implica la introducción de una serie de modificaciones en el texto de la ley electoral al tiempo que afirma que la consagración de la igualdad de género no es un regalo pero debe hacerse de acuerdo con la Carta Universal de los Derechos Humanos.
Cabe recordar que el año 1993 marcó la entrada de las mujeres en la vida parlamentaria con dos diputadas. En 2002, el número aumentó a 35 mujeres , por la reserva de esaños a las mujeres en la llamada «lista nacional» , mientras que cinco mujeres han conseguido ganar sus escaños con valentía en las listas locales . En las elecciones municipales de junio de 2009, un total de 3.406 mujeres fueron elegidas, más de 12% del número total de funcionarios electos. Mejor aún en las elecciones parlamentarias de noviembre 2011 han permitido la elección de 60 mujeres inscritas en la lista nacional y más candidatas que se presentaron en las listas locales. Además, dos mujeres mujeres presiden dos comités de los nueve existentes en la Cámara de Representantes.
Menara – (Fundación Sur)
