La ONU está investigando los informes sobre la masacre cometida por los rebeldes ugandeses en la República Democrática del Congo. Según un alto oficial de la ONU, hasta cien personas fueron asesinadas en el supuesto ataque, que se cree que tuvo lugar en febrero.
John Holmes, el jefe de la agencia humanitaria de la ONU, dijo durante una visita al país, que se estaba llevando a cabo una investigación sobre el ataque. Si las acusaciones son ciertas, la cifra de personas asesinadas entre diciembre de 2009 y marzo de 2010 ascenderá a más de 500.
Holmes señaló que los rebeldes del Ejército de Resistencia del Señor, LRA, ha llevado a cabo la masacre en el pueblo de Kpanga en el noreste del país, cerca de la frontera con el Sur de Sudán y la República Centroafricana.
Después de visitar el remoto pueblo de Niangara, cerca del pueblo donde supuestamente se cometieron los asesinatos, Holmes declaró que se ha lanzado una investigación para “averiguar qué pasó exactamente”.
Además, en el mismo periodo de tiempo, entre diciembre y marzo, más de 300 personas fueron secuestradas, la mitad de ellos niños.
Un número sin especificar de habitantes de la zona también fueron mutilados, según la ONU. Entre los mutilados está Marie Mbolihundele, que afirma que tres rebeldes del LRA la retuvieron hace dos semanas y la cortaron los labios y una oreja. “Me ordenaron tumbarme en el suelo y me dijeron que si gritaba me matarían”. “Empecé a rezar, entonces cogieron mis labios con unos alicates y me los cortaron con un cuchillo. Después me dijeron que corriera.”
El representante de la ONU pidió a la comunidad internacional que ponga fin a este “reinado del terror”.
El LRA se estableció en 1987 con la intención de derrocar al gobierno de Uganda. LA revuelta terminó en 2005, pero los rebeldes huyeron a la RDC y empezaron a lanzar ataques a civiles.
(News 24, 03-05-10)