Cindy McCain, responsable del Programa Mundial de Alimentos, afirmó que los combates en Sudán, en el cual se enfrentan al ejército del país y las Fuerzas de Apoyo Rápido (RSF, por sus siglas en inglés), han destrozado las vidas de millones de personas en toda la nación. El conflicto corre el riesgo de crear la mayor crisis de hambre del mundo, advirtió McCain al terminar un viaje al país fronterizo, Sudán del Sur, donde cientos de miles de sudaneses han huido de los combates en su país de origen.
Según la agencia alimentaria de la ONU, unos 18 millones de personas en todo Sudán padecen hambre aguda, y los más desesperados se encuentran atrapados tras las líneas del frente. Entre ellos, 5 millones se enfrentan a la inanición. El conflicto también ha causado más de 10 millones de personas desplazadas y alrededor de 600.000 refugiados que han huido a Sudán del Sur.
Sudán se sumió en el caos a mediados de abril, cuando estallaron los enfrentamientos en la capital, Jartum, entre el ejército del país, dirigido por el general Abdel Fattah Burhan, y el grupo paramilitar conocido como Fuerzas de Apoyo Rápido, comandado por el general Mohammed Hamdan Dagalo, conocido como «Hemetti». La violencia se extendió rápidamente por todo el país, particularmente en las zonas urbanas, así como en la conflictiva región occidental de Darfur. Aquí, el conflicto adquirió un formato diferente, donde los ataques de las Fuerzas de Apoyo Rápido y sus aliados contra civiles de etnias rivales fueron considerablemente mas brutales, ya que llevaron a cabo asesinatos étnicos y violaciones generalizadas mientras tomaban el control de la región. La región de Darfur tiene una historia sumida por el genocidio y los crímenes de guerra y parece que esta historia corre riesgo de repetirse. El fiscal de la Corte Penal Internacional, Karim Khan, afirmó a finales de enero que hay motivos para sostener que ambas partes del conflicto están cometiendo posibles crímenes de guerra.
The Associated Press ha recibido recientemente el borrador de una resolución de la ONU, promovido por Gran Bretaña, en el cual se pide un cese inmediato de las hostilidades en Sudán antes del mes sagrado musulmán del Ramadán. La resolución propuesta llama a todas las partes a eliminar las obstrucciones y facilitar el acceso humanitario ininterrumpido, rápido y seguro. El borrador también insta a fortalecer la coordinación de varios esfuerzos regionales e internacionales.
Autores: Samy Magdy y Edith M. Lederer
[Traducción y edición: Micaela Llona Bavestrello]
[CIDAF-UCM]
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