El pasado 24 de marzo fue el 134 aniversario del descubrimiento por Robert Koch de la bacteria que provoca la tuberculosis (TB), la mycobacterium tuberculosis. Países de todo el mundo se unieron para combatir la enfermedad en un día cuyo objetivo es el de aumentar la concienciación sobre uno de los mayores asesinos del mundo.
La OMS propuso erradicar la TB para 2030, un objetivo ambicioso, puesto que se estima que alrededor de 4 000 personas siguen perdiendo a diario sus vidas a causa de esta enfermedad.
Desde el año 2000, los esfuerzos activos de la OMS y de otros que colaboran activamente por combatir los efectos de la enfermedad han logrado que se salvasen 43 millones de vidas y que se redujera la tasa de mortalidad en un 47 %.
Sudáfrica se ha unido a la campaña y ha creado el «plan de los 90»:
– Investigar la situación de al menos el 90 % de los miembros de poblaciones clave y grupos vulnerables frente a la TB.
– Asegurarse de que al menos al 90 % de los sospechosos de estar infectados por la TB se les realizan pruebas que lo confirmen y se les proporciona tratamiento.
– Lograr que al menos el 90 % de los tratamientos terminen con éxito.
Los esfuerzos anteriores del gobierno de Sudáfrica han desembocado en resultados positivos en el porcentaje de cura: del 49,7 % en 2001 al 71,1 % en 2009.
El día mundial de la tuberculosis del año pasado, el gobierno, junto con socios del Consejo Nacional sobre el sida de Sudáfrica (South African National Aids Council), inauguró una campaña masiva de investigación con una duración de tres años, cuyo primer año se centraría en comunidades con gran actividad minera.
Si el gobierno quiere desarrollarse y derrotar a la TB de manera realista, tiene que crear un plan simultáneo para tratar a las personas VIH positivas que viven con la enfermedad. Se calcula que un 65 % de los infectados por tuberculosis son seropositivos.
El 80 % de los sudafricanos tienen TB, sin embargo, la mayoría de ellos tienen la bacteria en estado latente, lo que quiere decir que no presentan síntomas y no pueden transmitir la bacteria, pero existe el riesgo de que se active si uno se pone enfermo.
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