“Más de un millón de niños en la República Democrática del Congo enfrentan desnutrición aguda”; es la preocupante advertencia que ha lanzado la Organización Mundial de la Salud (OMS). La desnutrición aguda, empeorada por la inseguridad alimentaria, constituye un problema persistente y creciente en las regiones del país afectadas por años de conflicto. La reciente intensificación del conflicto en el este del país entre las fuerzas congoleñas y la milicia del M23, ha forzado a muchas personas a abandonar sus hogares, aumentando la vulnerabilidad de la población, sobretodo la infantil.
La OMS ha calificado la situación como «catastrófica«, señalando que los sistemas de agua y saneamiento están colapsando, lo que ha provocado brotes de enfermedades como el cólera, el sarampión y la viruela. Además de la violencia, las graves inundaciones y deslizamientos de tierra han incrementado las necesidades humanitarias en otras partes del país. Actualmente, más de 25 millones de personas en la RDC requieren de asistencia, la mayor cifra a nivel mundial, pero la ayuda sigue siendo insuficiente.
La entrega de ayuda humanitaria ha sido obstaculizada por impedimentos burocráticos, presencia militar y bloqueos de carreteras, dificultando la provisión de asistencia vital a las personas necesitadas. Al respecto, la OMS ha realizado un llamamiento urgente a la comunidad internacional para que tome medidas inmediatas y garantice un «acceso sostenido y sin obstáculos» a las áreas afectadas.
Fuente: Africa News
[Traducción y edición, Bruno Rodríguez]
[CIDAF-UCM]
