La misión de Naciones Unidas en la República Democrática del Congo, MONUC, ha comenzado las investigaciones a gran escala sobre los asesinatos de al menos 17 civiles, en los pueblos de Luofu y Lasiki, en la región de Kivu Norte.
MONUC asegura que pretende encontrar y castigar a los responsables de estas atrocidades, que ocurrieron el pasado fin de semana, en las que murieron civiles inocentes de los dos pueblos. No está claro qué grupo armado está detrás de estos asesinatos, debido a que hay numerosos movimientos rebeldes en la inestable provincia del Kivu Norte.
Madnodje Mounoubai, portavoz de la MONUC, ha declarado que los investigadores trabajarán en estrecha colaboración con Kinshasa, para arrestar a los responsables de estos crímenes.
Mounoubai ha declarado que los responsables de los asesinatos serán juzgados una vez sean identificados, y añadió que Kinshasa está obligada a proteger la vida de todos los congoleños.
Testimonios de los habitantes de Luofo
Por otra parte, la organización Human Right Watch, ha difundido el día 23 un comunicado de prensa en el que acusa a los rebeldes ruandeses hutu del FDLR, de haber atacado los dos pueblos mencionados, recopilando testimonios de los afectados.
La organización HRW, asegura que el FDLR mató al menos a 7 civiles, 5 de los cuales eran niños pequeños, a los que quemaron vivos dentro de sus casas. Al menos otros 7 civiles resultaron heridos y quemaron unas 300 casas.
La organización publica fotos de los restos de los ataques, tras sus investigaciones en el pueblo de Luofo.
Estos ataques, según esta otra fuente, parece ser nuevas represalias deliberadas contra la población, por la operación conjunta que van a lanzar la MONUC y el ejército congoleño unos días después, contra ellos.
HRW reproduce en su comunicado algunos relatos de las víctimas y testigos de los ataques.
El padre de tres niños, de 3, 4 y 6 años, que fueron quemados vivos en su casa, relata el incidente, “El FDLR llegó y rodeó mi casa. Cuando intenté salir me dijeron que si salía me matarían. Pude moverme y retirarme un poco, fuera de mi casa, pero mis tres hijos pequeños estaban todavía dentro, durmiendo, entonces los combatientes entraron y le prendieron fuego a la casa, mis tres hijos perecieron dentro”.
Una mujer de Luofu también relata el ataque: “Estaba dentro de mi casa cuando oí los primeros disparos. Oí a gente que estaba destruyendo las tiendas y puestos. Entonces oí a alguien que gritaba “¡despierta! ¡despierta!”, salí y vi a los interhamwe quemando las casas de detrás de la mía. Entonces vinieron y me arrancaron la ropa hasta que me dejaron totalmente desnuda, prendieron fuego a mi casa y me dijeron que corriera. Agarré a mi bebé y corrí, desnuda. Los tiros continuaban. Había montones de gente escondida entre los arbustos. Allí, los mosquitos nos estuvieron picando toda la noche”.
(Africa News/Human Right Watch, 23-04-09)
