La huelga de médicos en Kenia continúa, dejando a los hospitales públicos prácticamente desprovistos de atención sanitaria. La falta de acuerdo entre los médicos y el gobierno ha llevado a una situación crítica, con consecuencias devastadoras para los pacientes que dependen del sistema de salud pública del país. En varios hospitales, como el Hospital Kihara Nivel 4, en las afueras de Nairobi, la capital, la escasez de personal médico es evidente. La mayoría de las camas en las salas de parto están vacías, y las mujeres que necesitan procedimientos como cesáreas no pueden recibir tratamiento debido a la falta de médicos capacitados.

La huelga, que ya se ha extendido por más de un mes, se ha desencadenado por una serie de problemas, entre ellos la cuestión salarial y la falta de contratación de personal cualificado. Los médicos han salido a las calles a exigir mejores condiciones laborales y una compensación adecuada. A pesar de los esfuerzos de mediación, las negociaciones entre los médicos y el gobierno no han logrado un acuerdo satisfactorio, lo que está provocando que los pacientes tengan que recurrir a hospitales privados de precios elevados o posponer sus tratamientos, lo que puede conducir a complicaciones graves.

Las autoridades gubernamentales han instado a los médicos a regresar al trabajo y han amenazado con tomar medidas disciplinarias, como despidos, contra aquellos que no lo hagan. Sin embargo, los médicos se mantienen firmes en sus demandas, argumentando que la huelga es necesaria para garantizar una atención médica de calidad a largo plazo. Mientras tanto, la población keniana enfrenta dificultades y preocupaciones cada vez mayores. Figuras religiosas y líderes de la oposición han instado al gobierno a reanudar las negociaciones y resolver la crisis de salud que enfrenta el país. Aunque se desconoce cuánto tiempo más continuará la huelga, muchos esperan que pronto se alcance un acuerdo para evitar un mayor deterioro de la situación de salud en el país.

Autor: Basillioh Rukanga

Fuente BBC Africa  – Imagen JacobOcenFay

[Traducción y edición, Bruno Rodríguez]

[CIDAF-UCM]