La grandeza de la mujer en el sufrimiento. (Tatuaje de encías de las mujeres en Senegal)

17/07/2014 | Crónicas y reportajes

Mujeres negras con dientes blancos y encías negras exhiben su belleza a través de una sonrisa.

Así, la realizadora senegalesa, Angèle Diaban puso una nota de color al debut de su cortometraje “Mi bella sonrisa” de cinco minutos, estrenado en 2005. En él nos revela el fenómeno del tatuaje de encías de las mujeres en Senegal. A lo largo de todo el cortometraje suscita en el público cierta curiosidad y ganas de descubrir este ritual tradicional. El corto comienza y acaba con una mujer sonriente, orgullosa de adquirir nuevas encías a través del tatuaje, sin importar del qué tipo sea. El argumento trata de una mujer africana que se entrega a las costumbres y tradiciones de su comunidad.

La realizadora Angèle Diabang zanja así el debate motivado por la elección del tema de su film. Una elección que asume a través de los personajes, que son todas mujeres africanas, para marcar el valor de esta costumbre. Pero la realizadora va más allá, y provoca en el público, como decimos, cierta curiosidad y ganas de practicar esta costumbre para adquirir esta bonita sonrisa.

La película sigue una cierta progresión, puesto que el interés del espectador va en aumento, al hilo de la práctica del ritual, donde la realizadora nos muestra el mundo del tatuaje con agujas y pañuelos extendidos, la tinta, cómo una anciana mujer que lo lleva a cabo con destreza, está bien acompañada por otras que la asisten.

Pero al hacer una lectura profunda del film, uno se da cuenta de que esta bella sonrisa, no es más que un pretexto para plantear otro debate: cómo la educación de la joven muchacha en la edad adulta, su preparación para afrontar las dificultades de la vida, los momentos de sufrimiento, como el alumbramiento o el matrimonio, que son valores sagrados en África, debe hacerse en silencio.

En esta secuencia, Angèle juega oponiendo los personajes. Uno que parece querer descubrir esta cultura y no lo consigue y otro anclado en las tradiciones y las costumbres. En este punto, la realizadora muestra al principio a la mujer a la que comienzan a hacerle el tatuaje y que, sin embargo, se retira sin terminar el ritual, a causa de los dolores, y cómo posteriormente, Angèle la reemplaza: “No pensaba que fuera tan doloroso”, “No pensaba que el rodaje sufriera este contratiempo” señaló.

No obstante, a pesar del dolor, y gracias a su coraje y determinación, la tatuadora parece que vuelve a trazar el dibujo en las encías de la realizadora, que está luchando para que su cortometraje vea la luz. Y como ella dijo durante un curso en Dakar: “Tenía ganas de descubrir esta cultura, que es la mía. No quería acortar el rodaje y debí tomar el lugar de la otra mujer. Y esto me ha permitido reconciliarme con mi comunidad”.

Nunca queda completamente satisfecha con el resultado final de sus obras. Así ocurrió también con “Yandé Codou, la cereza de Senghor(1) ” o con “Senegaleses e Islam”, la realizadora armada de coraje y de tenacidad, acabó siempre por sucumbir al comienzo del rodaje. A Angèle le gusta decir: “Debí abandonar por razones financieras o por cosas peores aún, como ataques durante los rodajes o el casting. Estaba contenta con lo que tenía para realizar mis films”. La opción de tatuarse ante la huida en escena del personaje principal a causa del dolor, revela la fragilidad del proyecto de la realizadora.

Montadora de formación, ella presenta en esta película secuencia tras secuencia, en un tiempo muy corto, varios planos. Da vida a las imágenes, unas veces con el sonido del yembe, para materializar la caída de las agujas en el agua hirviendo, antes de empezar el tatuaje, y otras, con los gemidos de la mujer, para venerar el coraje de nosotras, las mujeres.

Este film fue premiado en varios festivales con el premio Graine de Doc (Semilla de Doc –documental-) en el festival “Doc en courts” (de cortometrajes documentales) de Lyon en 2006 y recibió una mención especial en el festival de cine africano de Apt (2) en 2006.

Denise Zarour Medang.

SudQuotidien. (Dakar, Senegal)

1 – Léopold Sédar Senghor, poeta y político senegalés. Primer presidente de Senegal en 1960. También fue miembro de la Academia francesa.

2 – Es un municipio francés de la región de Provenza-Alpes-Costa Azul

Traducción de Antonio Vázquez

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