Pero, a pesar de todas las críticas, dejó muy claro que Zimbabue no aceptaría ayudas si éstas venían con la condición de que el país acepte los derechos de los homosexuales.
El presidente Robert Mugabe celebró, el sábado, su 92 cumpleaños con una fiesta de casi 1 millón de US dólares organizada por sus partidarios en una zona afectada por la sequía, lo que generó críticas de sus opositores que señalan que las celebraciones eran una afrenta a los zimbabuenses.
Mugabe, único líder de Zimbabue desde su independencia de Gran Bretaña en 1980, dijo que nadie se moriría de hambre como consecuencia de una sequía que ha dejado tres millones de personas necesitadas y la solicitud de declaración de zona catastrófica en la mayoría de las zonas rurales.
Pero, a pesar de todas las críticas, dejó muy claro que Zimbabue no aceptaría ayudas si éstas venían con la condición de que el país acepte los derechos de los homosexuales. «Si la ayuda, según tengo entendido, será dada sobre la base de que aceptemos los matrimonios homosexuales, la ayuda puede quedarse donde está”, declaró Mugabe en un discurso de una hora de duración. «Nosotros no la queremos. Es una ayuda podrida y sucia».
Zimbabue ha hecho una petición de casi 1.6 billones de US $ para poder pagar el grano y otros alimentos, pero, hasta el momento, se sabe que ninguna organización de ayuda ha respondido a esta petición.
El líder más antiguo de África, Mugabe, cumplió 92 el 21 de febrero y no dio ninguna muestra de pensar en retirarse, para frustración de algunos miembros de su partido ZANU-PF, que llevan mucho tiempo tratando de posicionarse para su sucesión.
Mugabe agradeció a los jóvenes del ZANU-PF la organización de la fiesta. Se soltaron 92 globos y se escucharon lecturas de poemas, canciones y cantos alabándoles como un icono africano y un visionario.
Se cortó un pastel gigante hecho para parecerse a las antiguas ruinas de las cuales viene el nombre de Zimbabue.
Las suntuosas fiestas de cumpleaños de Mugabe se han convertido en una peregrinación anual tanto para los leales como para los que buscan los favores del veterano líder, pero la celebración de este año en la provincia de Masvingo, maltratada por la sequía, ha sido particularmente polémica.
En Masvingo, el 75% de la cosecha de maíz, alimento de primera necesidad, se ha perdido debido a las condiciones climáticas, por lo que es la región más afectada en el país, por la peor sequía desde principios de 1990.
«El dinero que se está gastando para esta mal concebida fiesta de cumpleaños, en realidad se debería utilizar para importar maíz y evitar la inanición inminente en la provincia de Masvingo y otras partes del país» declaró en un comunicado, Obert Gutu, portavoz del principal partido de la oposición, Movimiento por el Cambio Democrático (MDC).
Los críticos culpan a Mugabe de muchos de los problemas a los que se enfrenta el país. Dicen que sus políticas, incluyendo la redistribución de las granjas propiedad de blancos, han conducido a una de las economías más prometedoras de África a una profunda recesión hasta que en 2008 redujo su producción casi a la mitad.
Según Mugabe, «los británicos y los americanos, tan astutos como siempre, han utilizado este tipo de oportunidades para ofrecer grandes sumas de dinero a particulares, tanto dentro como fuera del partido, con el fin de causar el fraccionamiento».
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Fundación Sur
