La diáspora congoleña acaba de rechazar categóricamente la organización de las elecciones con Joseph Kabila, así como el calendario electoral publicado por la CENI, del pastor Daniel Ngoy Mulunda.
De hecho, la diáspora confirma y declara con convicción y evidencias que Joseph Kabila es un impostor de reputación internacional al servicio de la mafia internacional para ejecutar el diabólico plan de balcanizar la República Democrática del Congo. Después de su golpe de estado constitucional, que determina que las elecciones presidenciales se lleven a cabo en una sola vuelta, para instaurar el monopartidismo dictatorial con sus sub-partidos, su negativa a volver a censar a la población y establecer el carnet de identidad nacional, después de diez años de reinado sanguinario, Joseph Kabila ha logrado nombrar a su chico de los recados como encargado de identificar y corromper a los opositores a su régimen genocida, a la cabeza de la institución encargada de organizar y arbitrar las elecciones en la RDC.
Teniendo en consideración todos estos hechos, la diáspora congoleña mantiene y afirma que cualquier idea de elecciones bajo el régimen de Kabila, conllevará consecuencias violentas incontrolables, que Joseph Kabila debe desactivar antes de hablar de democracia y elecciones en la RDC.
En cuanto al famoso presidente de la Comisión Electoral Nacional Independiente, CENI, el pastor Daniel Ngoy Mulunda, la diáspora lo acusa de conspiración con el poder actual y denuncia la parcialidad y la inmoralidad del pastor, además de reprocharle sus contactos confirmado con el PPRD de Kabila, y sus colaboradores, de los que es miembro activo y uno de sus más notables “sepultureros”. Esta metamorfosis no hace más que esconder los enormes peligros como traición y la tragedia nacional que la diáspora congoleña se niega a avalar ingenuamente de antemano.
Ngoy Mulengo es increíble, un elemento peligroso y al servicio del poder, de la impostura y la ocupación sanguinaria de Joseph Kabila y del PPRD, ha sido un excelente policía y chico de los recados, encargado de identificar a los oponentes y corromperlos sistemáticamente. Se le ha visto desfilar en Europa con mucho dinero para cumplir con convicción y orgullo esta sucia misión. Hoy, la sorpresa es dramática, escandalosa, ver al pastor especialista en mafia y corrupción, transformado en alta autoridad de la institución encargada de organizar y arbitrar las elecciones “democráticas e independientes” en la RDC, de las cuales, la diáspora está excluida de antemano. Las elecciones para las que la ley electoral y las listas de electores todavía no están preparadas.
La diáspora que cree que la RDC está bajo ocupación de un poder impostor sanguinario y humillante, considera que la organización de las elecciones en estas condiciones, es para legitimar y mantener el poder de impostura de Joseph Kabila y sus colaboradores locales, para seguir imponiendo al pueblo congoleño la dominación extranjera, la tragedia nacional con las masacres y deportaciones de poblaciones locales del este, los arrestos arbitrarios y asesinatos de oponentes políticos y de opinión, el pillaje y tráfico ilícito de minerales y las violaciones sistemáticas de los derechos humanos, tan denunciados por la comunidad internacional y los países vecinos.
Incluso la oposición política no está a salvo, la diáspora cree que todo líder político, como el ejemplo de Etienne Tshisekedi, que acepte la celebración de las elecciones en estas condiciones y se lance a la carrera para presentarse e intentar derrocar a Joseph Kabila por este método, será tratado como un traidor y aliado con el poder de la impostura y la ocupación sanguinaria. Todos estos compatriotas sufrirán las sanciones apropiadas.
Congo Tribune
