La caza furtiva de rinocerontes en el Kruger Nacional Park (Sudáfica) es letal. Y no sólo para los rinocerontes. El pasado 9 de octubre, el antiguo presidente de Mozambique, Joaquim Chissano, desveló estadísticas mostrando que, en los últimos cinco años y medio, cerca de 500 mozambiqueños, sorprendidos mientras cazaban furtivamente en el parque, murieron a causa de los disparos procedentes de los guardas del parque y de las fuerzas de seguridad.

Hablando en la ceremonia de apertura del décimo aniversario de la Fundación Chissano, el antiguo presidente hizo un llamamiento para un mayor esfuerzo para parar el reclutamiento de jóvenes mozambiqueños por las redes criminales organizadas, que están por detrás de la caza furtiva de rinocerontes.

Según un informe, publicado el día 6 de octubre por el diario “Noticias” de Maputo, Chissano dijo que en 2010 los guardas de caza sudafricanos mataron a 54 mozambiqueños en el Parque Kruger. Al año siguiente, el número subió a 66, y después bajo ligeramente hasta 58 en 2012. En 2013, 106 cazadores furtivos mozambiqueños murieron en el parque, y en 2014 el número de muertos era de 110. Este año puede marcar un triste record ya que, en los primeros seis meses, 82 mozambiqueños fueron interceptados y muertos. Así pues, entre enero de 2010 y junio de 2015, 476 cazadores furtivos mozambiqueños perdieron su vida en el Parque Nacional Kruger.
“Estoy muy preocupado por el gran número de mozambiqueños muertos en el Parque Kruger mientras realizaban la caza furtiva”, dijo Chissano. “Cada uno de estos muertos mozambiqueños significa más pobreza para su familia, ya que no podrán contar con él en su lucha por mejorar el nivel de vida”.

Chissano dijo que su Fundación ha comenzado a identificar proyectos en las comunidades en las que los cazadores furtivos son reclutados. Esos proyectos podrían ofrecer empleo a los jóvenes mozambiqueños, como una alternativa más digna y más segura que la caza furtiva.
Chissano dijo que, a pesar de las enormes dificultades a las que se enfrenta, su Fundación ha conseguido establecer fuentes de agua potable en algunas comunidades rurales pobres, ha distribuido material escolar y ha mandado jóvenes mozambiqueños a un campamento internacional en Ucrania, antes del comienzo de la guerra actual contra los separatistas apoyados por Rusia.

Chissano añadió que su Fundación ha intervenido en la mediación de conflictos en varios países como Madagascar, Guinea-Bissau y la República Democrática del Congo. También ha intentado encontrar una solución al conflicto rivereño del lago Niassa entre Malawi y Tanzania.
Como parte de las ceremonias, la Fundación ha firmado un convenio de cooperación con Radio Mozambique para publicar sus actividades contra la caza furtiva, con el objetivo de desanimar a los mozambiqueños en la participación en estas actividades criminales. Un convenio semejante ha sido firmado con el cantor Señor (Mister) Bow, que lanzó un disco el 2 de octubre, sirviéndose de la música para denunciar la caza furtiva.

allafrica Traducido por Jesús Zubiría