Las actividades mercenarias como fuente de inseguridad y desestabilización en África centran un debate del Consejo de Seguridad de la ONU, un asunto promovido por Guinea Ecuatorial ante la creciente amenaza de ese flagelo.
Aunque aún no se aprobó el programa de trabajo del Consejo para enero, hay algunas reuniones ya previstas, precisó el embajador de Guinea Ecuatorial, Anatolio Ndong Mba, que este mes presidente el órgano de 15 miembros.
Este lunes se espera que el presidente ecuatoguineano, Teodoro Obiang Nguema Mbasogo, encabece la sesión; la cual también contará con la presencia del secretario general de la ONU, António Guterres, y el presidente de la Comisión de la Unión Africana (UA), Moussa Faki Mahamat.
Como miembro del Consejo de Seguridad, entre las prioridades de Guinea Ecuatorial está promover las posiciones de la UA sobre temas africanos y en la defensa del interés del continente, con especial atención en la región central.
Precisamente en esa zona, los grupos mercenarios y las actividades ilegales que realizan representan una seria amenaza a la independencia, la soberanía, la seguridad y la integridad territorial, apuntó la representación ecuatoguineana.
El reclutamiento, financiamiento y capacitación de mercenarios viola los propósitos y principios de la Carta de Naciones Unidas, el Acta Constitutiva de la UA y otros instrumentos jurídicos, indica una nota conceptual difundida con motivo de la reunión de este lunes.
La falta de conciencia y la ausencia de medidas coordinadas para prevenir esas actividades delictivas y contrarrestar su proliferación da lugar a la pérdida de vidas humanas y daños materiales significativos, añade.
Además, tiene un impacto negativo en las políticas nacionales, las economías y la convivencia pacífica de las naciones.
La seguridad y la estabilidad en África Central son una fuente de preocupación continua debido a la presencia de grupos insurgentes, extremistas radicales y grupos terroristas que ayudan a perpetuar los conflictos.
En ese contexto, la creciente amenaza de las actividades mercenarias representa un grave peligro en un área rica en recursos naturales.
Los grupos mercenarios suelen operar como ‘armas de alquiler’ para cualquier tipo de actividades subversivas e ilegales, como el tráfico de armas y drogas, la trata de personas, la explotación ilegal de recursos, la caza furtiva y las acciones terroristas.
Durante las últimas dos décadas, la actividad de agrupaciones mercenarias se beneficia de problemas estructurales como la debilidad institucional de los Estados, las fronteras nacionales porosas, la pobreza y el desempleo.
Las redes criminales transnacionales que esos grupos establecen se utilizan para todo tipo de delitos que dañan los intereses colectivos de la Humanidad, alertó Guinea Ecuatorial en su nota para la reunión del Consejo de Seguridad.
Sin una reacción sólida de la comunidad internacional, la situación actual podría deteriorarse rápidamente, desestabilizando toda la subregión y precipitando más conflictos a largo plazo, agregó.
La ONU, la Unión Africana y la Comunidad Económica de los Estados de África Central coinciden en que los mercenarios son una de las principales amenazas para la paz y la seguridad en esa región.
Fuente: Prensa Latina
[Fundación Sur]
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