La afrocolombianidad es una construcción que por décadas hemos venido haciendo los negros y negras colombianos, que reivindicamos nuestra cultura ancestral ,evidenciando a nivel de memoria histórica, la esclavización a la que fueron sometidos nuestros antepasados, y el robo de identidad, la misma identidad que hoy traspasa la piel y emerge en ritmos, talento, ciencia, cultura, alegría, color, letras, y todo lo hermoso que produce nuestra población afrocolombiana.
Ser Afrocolombiana y poder celebrarlo hoy junto a otras hermanas y hermanos negros, mestizos, blancos, mulatos, indígenas, es una alegría para mí, demuestra que hemos vencido y que a pesar del plan de exterminio al que fuimos sometidos en otrora época, hemos resistido y existimos.
La construcción étnica es mucho más que piel, he visto blancos de ojos azules tocando candombe en la Buenos Aires tan “europea” y negros que se creen blancos y me miran como la “corroncha”, pero no neguemos la realidad, llevar este cuero es para personas con honor y valentía, que resisten y enfrentan el racismo (que muchos niegan y al negarlo te hacen racismo) , los negros seguimos siendo los más pobres, los más marginados en Colombia y en Latinoamérica.
Aún no hay ministros negros en Colombia, y no por que los negros y negras no estudien y se la pasen en la hamaca comiendo plátano frito, hay muchos herman@s que han entregado lo mejor de sí en la academia y son grandes profesionales destacados, que podrían perfectamente, representarnos en altos cargos de gobierno, pero no puedo dejar pasar esta oportunidad sin denunciar, justamente el robo de esos espacios que nosotr@s luchamos y conseguimos cómo la representación en el congreso, curules que fueron apropiadas por politiqueros que nunca han tenido construcción afro y no hablo necesariamente de su piel, jamás estuvieron con nuestros padres militando la ley 70, reivindicando nuestros derechos, y mucho menos denunciando la discriminación, o sea son afros de “mentiras” que por ineficacia del estado, o por corrupción, y hasta por culpa de nosotros mismos (por confiados) dejamos que se encaramaran en esos asientos que son para nuestra comunidad que tanto lo necesita. Por eso esto no para, esta lucha nos e toma vacaciones, esta lucha es de amor, de convencer al otro, de exigir, de dar, de aportar ideas, y de no desfallecer!
“Yo tengo un sueño” y es el despertar de todo mi pueblo afrocolombiano para aportar granitos de arena en esta construcción que el “indomable” Benkos Biojó nos dejó como legado, en su lucha por la libertad, que nos heredó el altísimo honor de ser los hijos DEL PRIMER PUEBLO LIBRE DE AMÉRICA LATINA.
VIVA PALENQUE! VIVA COLOMBIA NEGRA!
Claudia Quintero
Fuente Voz del pueblo Latinoamericano Prensa
