El Centro Internacional para la Política y el Conflicto, ICPC, de Kenia dice que la actual constitución afianza el mal gobierno y la corrupción.
El organismo de derechos humanos keniata dice que la constitución fomenta la impunidad y salvaguarda una presidencia imperial, lo cual es un obstáculo para la democracia.
El director ejecutivo del ICPC, Ndung’u Wainaina, y el presidente de la junta directiva, Njeri Kabeberi, dicen que la constitución tiene muchas leyes de la era colonial, especialmente del periodo de emergencia.
Estos expertos aseguran que el fracaso histórico de la Constitución para proteger la democracia deja a los keniatas peligrosamente expuestos a la tiranía del parlamento y la presidencia.
“Esta es la razón por la que los parlamentarios pueden conspirar en cuestión de minutos y ponerse de acuerdo para aumentar sus salarios y prestaciones, sin tener en cuenta cómo le vaya a sentar a la opinión pública”, señala Wainaina, añadiendo que la nueva constitución introduce reformas institucionales y electorales cruciales.
Según ellos, el proyecto de constitución tiene muchas ventajas para los keniatas, añadiendo que los que se oponen a él buscan su propio beneficio y acusaron a algunos de ellos de ser parte del “ruinoso pasado” del país. “Nosotros decimos que el proyecto de constitución conforma un puente entre el ruinoso pasado y el renacimiento de una nueva nación”, explicó Wainaina en una rueda de prensa en Nairobi, el día 18 de julio.
(The Standard, Kenia, 19-07-10)