El gobierno de Kenia ha aprobado una financiación de 4.000 millones de chelines, alrededor de 36 millones de dólares, para el programa de mitigación de sequías en el país. La medida tiene como objetivo reducir el impacto de la sequía en las comunidades afectadas, proporcionándoles agua y alimento durante el período de escasez de lluvias.
Este plan ha sido aprobado por el gabinete del presidente, William Ruto, el pasado 28 de febrero, tras la presentación de un informe sobre la situación de la sequía en el país y el apoyo que estaban recibiendo los hogares vulnerables y los niños que iban a la escuela. La sequía es un problema recurrente en Kenia, especialmente en las zonas áridas y semiáridas del norte del país, y ha sido agravada por el cambio climático y la deforestación, por lo que en la actualidad más de cuatro millones de kenianos se enfrentan al hambre y carecen de acceso al agua, mientras que más de 960.000 niños están desnutridos.
El gabinete ha instado a las autoridades locales a implementar las medidas de mitigación de sequías de manera efectiva y a garantizar que los recursos sean utilizados de manera adecuada y transparente. La financiación aprobada por el gabinete moviliza parte de la donación de 16.000 millones de chelines (117.218.400 €) de la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID) para reducir el impacto de la sequía en las comunidades más vulnerables.
Fred Kagonye
Fuente: The Standard
[Traducción y edición, Elena Cañete Montilla]
[CIDAF-UCM]