El Sudan y Gambia han sido subrayados por Amnistía Internacional debido a la pena de muerte que se sigue ejerciendo en esos países.
Amnistía Internacional ha publicado el pasado 10 de Abril su memoria anual a cerca de las condenaciones a muerte y ejecuciones del año 2012.
De las 682 ejecuciones habidas en el mundo, 40 de ellas han tenido lugar en el África Sub-Sahariana. Una cifra a la alza marcada por los aumentos de las ejecuciones en Sudan y Gambia. Esta ONG lanza una voz de alarma al resaltar notablemente a estos dos países en donde el número de ejecuciones es muy superior a la media africana.
Según el Informe de Amnistía Internacional las condenaciones a muerte han aumentado en 2012 en el Sudan hasta llegar a la cifra de 199 sobre un total de 449 que se han reportado en toda el África Sub-Sahariana. Y lo mismo es el caso de las 19 ejecuciones que representan cerca de la mitad de las ejecuciones censadas en esta región.
La Organización de Defensa de los Derechos Humanos llama también la atención sobre la situación en Gambia. El presidente gambiano Yahiyah Jammeh ha puesto fin a últimos de Agosto pasado a una suspensión contra las ejecuciones, fusilando a nueve prisioneros condenados a muerte. En este mismo año 2012, por lo menos cinco personas han sido condenadas a muerte y unas 36 han sido detenidas- y declarados culpables sobre delitos inicuos o fundados en motivos políticos encontrándose siempre bajo la amenaza de una condenación a muerte y de ser ejecutados en cualquier momento. Informa la RFI.
De las 40 ejecuciones registradas en el África negra, el Sudan y Gambia han contabilizado 28 ellos solos. Por tanto Amnistía Internacional ha vuelto a clasificar Gambia dentro de los países no-abolicionista.
A pesar de estos datos y de las situaciones críticas que se constatan en Sudan y Gambia, Amnistía Internacional expresa un aire de esperanza en el África Sub-Sahariana. La organización de Defensa de los Derechos Humanos del Hombre subraya una tendencia fuerte y favorable a la abolición de la pena de muerte.
Benín, por ejemplo ha sido el 75 estado en ratificar el protocolo facultativo, un texto de la ONU que intenta la abolición de la pena capital. Un protocolo que también ha sido firmado por Madagascar aunque no haya sido aún ratificado. Ghana es también un buen alumno aceptando conformarse con “la recomendación de la Comisión de revisión constitucional al invitar inscribir la abolición de la pena de muerte en la nueva Constitución.”
La situación en África del Norte
En África del Norte la pena capital está siempre de actualidad. Pero en el informe de Amnistía Internacional menciona la mejora de la situación en Túnez y Marruecos. En Túnez el gobierno de transición ha conmutado la pena de muerte a 125 personas según informa la organización de Derechos Humanos. Y matiza, “a pesar de que en el proyecto de la Constitución que ha sido propuesto no se renuncia a la pena de muerte”.
Globalmente, Amnistía Internacional afirma que en África del Norte las penas de muerte continúan a ser pronunciadas aunque luego las ejecuciones se hacen más raramente. La tendencia a la abolición de la pena de muerte es un hecho en África que se hace notar a finales del 2012.
Sin embargo debemos de seguir vigilando, previene la organización de Derechos Humanos del Hombre ya que este año aun, el número de ejecuciones está a la alza tanto en el mundo como en África.
Sebantian Badibanga
Pambazuka news, Abril 2013
Traducido del francés para Fundación Sur
