Teodorín Nguema, Vicepresidente de Guinea Ecuatorial, es investigado por lavado de dinero. La Justicia de EE.UU. muestra el gasto de hasta 650 veces superior a su salario anual. Nguema posee un triplex en S. Paulo.
El hijo mayor del dictador de Guinea Ecuatorial, y Vicepresidente Segundo del país africano, Teodorín Nguema Obiang Mangue, de 41 años, es sospechoso de lavado de dinero en Brasil por la compra de una propiedad inmobiliaria.
El sospechoso aparece en un documento de la Justicia de EE.UU, a la que la Folha ha tenido acceso. Según el Departamento de Justicia, Nguema, como se le denomina, gastó en 2008 más de 65 millones de dólares en bienes y servicios, el valor es 650 veces mayor que su salario anual público. Como funcionario público Nguema recibe oficialmente, según los EE.UU., 6.799 $ por mes, o menos de 100.000 $ por año.
Su mayor gasto individual en 2008 fue la compra de un apartamento triplex por 15 millones $, en São Paulo, en el exclusivo barrio de Jardins. También adquirió seis pinturas de Edgar Degas, Pierre Auguste Renoir, Paul Gauguin y Henri Matisse, por un total de 35 millones $, así como coches, joyas y antigüedades.
De acuerdo con los documentos obtenidos por Folha, el año 2008 fue en el que Nguema gastó más dinero en adquisiciones. En 2009 fueron 9 millones $, en 2010 37 millones $ y en 2011 7.600.000 $.
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En febrero de este año, Nguema llegó a ser controlados por la Policía Federal y se realizó un informe para la Interpol. Los Agentes de la Policía Federal también hicieron una visita a la casa comprada por Nguema, en São Paulo. Según señala el documento «Medidas preliminares, confirmadas con los residentes y el personal del edificio, muestran que la persona investigada es el dueño del apartamento triplex». En aquel momento, Francia emitió una solicitud para que fuera confiscado un avión adquirido por Nguema, pero no llegó a Brasil con el jet particular.
Los expertos creen que será muy difícil juzgarlo en Brasil por el delito de lavado de dinero. Según declara el abogado Kenneth Hurwitz, que pertenece a la ONG Open Society, «Esto no es corrupción africana, la corrupción es global. Estas desviaciones no existirían sin una colaboración de empresarios dudosos, banqueros, contratistas y otros profesionales que pagan sobornos o ayudan al lavado de dinero».
La relación entre Guinea Ecuatorial y Brasil se ha estrechado en los últimos años, con la creciente presencia de constructoras brasileñas en las obras del país. De acuerdo con el Departamento de Justicia de EE.UU., la rama de la construcción es, precisamente, la fuente de riqueza de Nguema, siendo el área de gobierno donde «la corrupción es más prominente».
En 2009, el diplomático Anton Smith redactó un informe que indica que el sector de la construcción es particularmente vulnerable a la corrupción en Guinea Ecuatorial. Según él, esta es la zona en la que «los gastos pierden visibilidad y en la que persisten las mayores oportunidades para la corrupción.»
Un informe de la embajada en 2011 describe las diferentes formas de corrupción en el país «transacciones encubiertas, ofertas de sobornos, tráfico de influencias en contratos de construcción y tasas de éxito por contratos firmados».
La Folha intento ponerse en contacto con el Gobierno de Guinea Ecuatorial para que explicase la fortuna del hijo del Presidente, pero no obtuvo respuesta. El Embajador en Brasil, Benigno Pedro Matute Tang, declaró que no podía discutir el tema porque no estaba oficialmente en el cargo.
En documentos de la Justicia de los EE.UU., Nguema atribuye su fortuna los contratos de infraestructura firmados por su empresa particular de construcción.
Fernando Mello, Flávia Foreque
Folha de S. Paulo