El domingo 13 de diciembre de 2009, M Ibn Chambas, presidente de la comisión CEDEAO declaró en Uagadugú lo siguiente:
“Todos los ingredientes para una situación explosiva se concentran, hoy en día, en Guinea. Una crisis profunda en este país dificultaría los esfuerzos que se están haciendo en los países vecinos (Costa de Marfil, Liberia, Sierra Leona y Guinea Bissau). Ante la amenaza de la violación de los derechos del hombre así como una violencia incontrolada, propongo que recomendemos a nuestras instancias superiores, el despliegue de una fuerza que proteja a los civiles y asegure la asistencia humanitaria en Guinea”.
Y añadió un mensaje a la delegación del CNDD [Junta militar en el gobierno de Guinea Conakry]:
“Tengan claro que las violaciones de los derechos del hombre no quedarán impunes. Pedimos firmemente un compromiso por parte de los miembros del CNDD para no presentarse a las siguientes elecciones.”
Como nosotros, se sorprenderán cuando lean el pasaje siguiente, escrito por M. Caba Bah para guinee news, que relata la reacción del desacreditado Moussa Keita “Dadis o la muerte» ante las lúcidas declaraciones de M. Chambas:
“El envío de cualquier fuerza extranjera a territorio guineano, sin la autorización previa del gobierno, será considerado como un atentado a la autoridad del Estado y a la integridad del territorio nacional.”
Y para aclarar sus palabras, el dirigente del CNDD añadió:
“Los países que pretendan enviar fuerzas, les invito a abstenerse porque, si de verdad lo hacen, consideraremos estos actos como una declaración de guerra y por lo tanto se tomarán medidas.»
Moussa Kéita e Idrissa Chérif no fueron apoyados por el ministro de asuntos exteriores Cécé Loua y por el primer ministro Komara, después de las declaraciones de Chérif dirigidas a Francia y de la decisión unilateral de Moussa de suspender las negociaciones de Uagadugú, por considerarlas belicosas. Se pensó incluso en expulsarles de la delegación pero, el general Konaté, la persona de confianza de la comunidad internacional y de algunos guineanos para que devuelvan el poder a los civiles elegidos por votación, les volvió a aceptar en el CND.
Hoy en día, nadie es capaz de definir cómo es la acción del CNDD y sobre todo de cómo es quién la dirige. Puesto que mucha gente oscura no hace más que desmentir y lo único que tiene en común es la ilegitimidad. El barco guineano, va a la deriva peligrosamente.
Los que gritan “tierra” al capitán del barco, en este caso al General Konaté, corren peligro de llegar a puerto agredidos.
El CND y su “gobierno” en bloque son ilegítimos y criminales reconocidos. No se puede encontrar nada bueno. Por lo tanto es urgente enviar fuerzas de seguridad extranjeras para evitar que se repita, a gran escala, la masacre del 28 de septiembre.
Esperemos que el “Síndrome Tshisékédi”, como lo definió de manera acertada nuestro compatriota A. Sinkoun Kaba, que parece que ha afectado a ciertos miembros de la oposición guineana, no dure mucho.
Conclusión
Piensen en esta declaración del presidente de Estados Unidos:
“Actuar sin violencia no habría sido suficiente para parar a Hitler, ni para convencer a Al- Qaeda de abandonar las armas”, Barack OBAMA, Premio Nobel de la paz 2009.
Thierno A DIALLO
Publicado en Guinee Presse, de Guinea Conakry, el 15 de diciembre de 2090.
Traducido por Victoria Pastor, alumna de la Universidad Pontificia Comillas de Madrid Traducción/Interpretación, colaboradora en la traducción de algunos artículos.
