La reunión el martes 7 de abril entre el Gobierno y los partidos políticos egipcios derivó en un violento choque verbal entre tendencias laicas y salafistas, relatan hoy medios allegados al encuentro.
Uno de los temas centrales de disensión es la Ley de Circunscripciones y el número de diputados que se permitirá presentar como candidatos de partidos.
Algunos delegados consideran que mantener la redacción actual del texto como plantean las autoridades resta credibilidad al diálogo.
Otro encontronazo ocurrió cuando el delegado del Partido de la Justicia Social (PJS) demandó la exclusión de los comicios del salafista Nour (Luz, en árabe) al que identificó como «aliado ideológico de ls Hermanos Musulmanes (HM, islamistas) y por lo tanto debía ser prohibido por ley.
Debemos tener cuidado al enmendar las leyes (electorales) para no permitir que remanentes de los Hermanos Musulmanes se infiltren en las próximas elecciones legislativas, afirmó Mahmoud Farghal, presidente del PJS, fundado durante el gobierno del expresidente Hosni Mubarak.
La alegación fue refutada por el vicepresidente del Nour, Ashraf Thabet, quien calificó de inaceptables las alegaciones de Farghal y recordó que su partido apoyó la destitución por el Ejército en julio de 2013 del expresidente Mohamed Morsi.
Según el recuento de un participante la violencia del intercambio obligó al primer ministro Ibrahim Mahlab a posponer la reunión hasta el jueves próximo.
Los comicios legislativos egipcios, donde no existe parlamento, son el tercer y último paso del mapa de ruta presentado por el Ejército en julio de 2013 tras derrocar a Morsi.
Prensa Latina – (Fundación Sur)