Ghana ha prometido ayudar a investigar los ataques cometidos en Costa de Marfil, que según los responsables marfileños fueron lanzados por seguidores del ex presidente Laurent Gbagbo, exiliados en el estado vecino.
Costa de Marfil cerró sus fronteras con Ghana el día 21 de septiembre, tras los mortales ataques armados a las instalaciones de la policía y el ejército, en una ciudad fronteriza y en su capital comercial, Abiyán, empeorando aún más las relaciones entre los dos mayores productores de cacao del mundo.
“El gobierno de Ghana está decidido y resuelto a que los dos países juntos investiguen estos incidentes, para beneficio mutuo”, según declaró el ministerio de Exteriores de Ghana en un comunicado publicado el día 24 de septiembre. “Ghana no va a permitir que la hospitalidad que ofrecemos a los refugiados… sea una oportunidad para planificar y ejecutar acciones que minen la soberanía, la paz y los esfuerzos de reconciliación”, añade el comunicado.
Ocho personas, incluidos seis atacantes, resultaron muertas durante los primeros ataques de este tipo desde agosto, cuando hombres armados lanzaron ataques casi a diario contra las fuerzas de seguridad.
Costa de Marfil ha culpado a los seguidores de Gbagbo, tanto de Costa de Marfil como del exterior, de planear los ataques, haciendo temer que se renueve la inestabilidad, un año después de que una breve guerra civil matase a más de 3.000 personas, después de que Gbagbo se negase a reconocer la victoria de Alassane Ouattara en las elecciones presidenciales.
Gbagbo fue capturado durante los combates en Abiyán, el año pasado y en estos momentos espera juicio en la Corte Penal Internacional, por cargos de crímenes contra la humanidad. Muchos de sus máximos aliados ahora viven en el exilio, incluido en Ghana. El ministro de Interior de Costa de Marfil, Hamed Bakayoko declaró a la agencia Reuters el día 21 de septiembre, que el ataque de la semana anterior fue “organizado, ordenado y ejecutado” desde dentro de Ghana. Los aliados políticos de Gbagbo han negado tener nada que ver con los ataques. El mes pasado, Ghana arrestó al ex ministro de Presupuestos de Gbagbo, Justin Kone Katinan, uno de los cerca de dos docenas de miembros del anterior régimen que están buscados con órdenes de arresto internacional, emitidas por Costa de Marfil el año pasado. Sin embargo, un tribunal ghanés puso en libertad a Katinan bajo fianza de 50.000 cedis [unos 20.000 euros], el día 18 de septiembre, estando pendiente su vista de extradición. Costa de Marfil anunció a última hora del día 23 de septiembre que volvería a abrir su espacio aéreo a vuelos de Ghana, pero mantendría cerradas sus fronteras terrestres y marítimas, bloqueando una carretera que es la principal ruta de transporte del golfo de Guinea, que va desde Costa de Marfil a Nigeria. Cientos de camiones están atascados en la frontera cerca de Noe, algunos de ellos con productos perecederos pudriéndose bajo el calor tropical.
(African News Agency, 25-09-12)
