Cuando una sociedad es maltratada, reacciona frecuentemente con violencia, o bien, como la sociedad Acholi de Uganda, con una protesta tradicional y eficaz.
Frente al despilfarro escandaloso de los gobernantes en Uganda, y a la amenaza de una expropiación forzosa de tierras de los Acholi, en el norte de Uganda, la sociedad, especialmente las mujeres, han recurrido a la tradición para manifestar su profunda indignación y protesta.
Despilfarro de los poderosos en una sociedad empobrecida:
En Uganda, el potencial humano, con una sociedad joven (media de 18 años), y cada día mejor educada, es increíble. Al mismo tiempo, el 82% de los jóvenes están en paro y desean emigrar a otros países en busca de una vida digna.
El potencial de los recursos naturales y minerales de Uganda es hoy bien conocido. Las reservas de petróleo y minerales, junto con unas tierras arables sumamente fertiles, siguen atrayendo inversores de todo el globo.
Al mismo tiempo, el 51 % del presupuesto nacional viene de fuera. Uganda se ve obligado, aunque parezca increíble, a importar más alimentos de los que exporta, por la injusta gestion de los mercados.
En esta situación, resulta escandaloso, como la segunda residencia presidencial en Entebbe, de las varias que posee dentro y fuera del país, tiene un gasto mayor que el presupuesto nacional combinado de salud y educación.
Al mismo tiempo, se suman más escándalos, como el aumento arbitrario de funcionarios y la subida de sus salarios y privilegios.
El último escándalo, señalado por el “Daily Monitor” del 30 de abril 2015, indica como los jefes del partido gobernante NRM, se han gastado 3.9 billones de Ug. Sh., para comprarse coches lujosos. Cada uno de estos coches de alta gama cuesta, según Kenneth Omona, tesorero del partido, unos: 360 millones de Ug. Sh.( 300.000 Euros), y fueron importados desde Londres.
K. Omona afirma que ellos tienen muchas fuentes de ingresos y que está seguro de que ganaran las próximas elecciones (2016), por mayoría absoluta!!!
Semejante despilfarro ocurre impunemente, y los gobiernos europeos y multinacionales siguen enviando fondos a dichos gobiernos, porque son sus aliados locales, cómplices en la explotación de los abundantes recursos naturales y minerales de la region.
Protesta de ancianas desnudas en Amuru, Acholi. Uganda:
Hace dos semanas, ministros y otros funcionarios del gobierno visitaron el distrito de Amuru, norte de Uganda, para privarles de sus tierras.
Cuando llegaron al poblado de Apea, Amuru, se encontraron con una gran sorpresa: las mujeres mayores se desnudaron ante ellos para protestar, oponerse y avergonzarles de la forma más enérgica que conocen en su tradición.
Cuando las mujeres y la familia se encuentran ante un grave peligro y no tienen otra defensa, las ancianas del pueblo se desnudan, y apuntan sus pechos hacia el enemigo en señal de maldición. Esta es una protesta desesperada y airada, que utilizaron las mujeres de Apea , para avergonzar y maldecir a los funcionarios del gobierno.
Ningún jefe local, en su sano juicio, llevaría a cabo su plan, ante semejante protesta. Ante esta maldición, nadie tomaría riesgos.
Otra protesta semejante ocurrió en 2012, ante el gobernante de Amuru: Milton Dongo que entregaba grandes extensiones de tierras a la compañía india “Madhvani Group” para producir caña de azúcar. Finalmente, las 40 hectáreas se quedaron para los residentes.
La única salida de esta maldición es la reconciliación, con la sociedad y con los espíritus de los antepasados. Estas medidas son realmente excepcionales y en este mundo tradicional, ciertamente eficaces.
Siempre existen medios para que una sociedad comprometida y solidaria pueda alcanzar sus objetivos fundamentales: respeto a la vida y a una vida digna.
