¿Existe un cine africano?, por Antonio Molina

27/11/2014 | Bitácora africana

En este artículo no vamos a tratar de las películas realizadas en África durante la época colonial por directores europeos o americanos. La pregunta que hacemos es: ¿Existe un auténtico cinema africano, dirigido por cineastas autóctonos, y realizado por actrices y actores africanos?

NACIMIENTO DE LA INDUSTRIA CINEMATOGRÁFICA AFRICANA

Casi con la llegada de las independencias, surgen los primeros ensayos de cine africano. En 1963, el senegalés Usmane Sambene rodó “Borom Sarret”< el carretero>. Este cortometraje de 20 minutos narra la historia de un carretero, que conduce sus carros los llama él, en Dakar, la capital de Senegal. Se trata de una parábola sobre los mecanismos de la pobreza en África. Es considerado el primer filme auténticamente africano.

TEMÁTICA DE ESTOS FILMES

Los cineastas africanos se han esforzado en presentar las culturas, la historia y las ‘estorias’ (leyendas) del continente, para acabar con los estereotipos del género Tarzán, producidos por los realizadores coloniales.

El padre del cine en Malí, Suleymane Cisé, afirma: “La primera tarea de los cineastas africanos es mostrar al mundo, que los africanos son seres humanos, ayudándolos a descubrir sus valores, que pueden ser puestos al servicio de los demás.”

EL CINE AFRICANO INDEPENDIENTE

Gracias a directores, como el referido Cisé, el cine independiente africano fue creciendo y se tornó una presencia permanente en los festivales de Cannes, en Francia, desde 1972. De allí saltó a festivales como Venecia, Berlin, Quebec, Uagadugú, Cape Town…
Yo estaba en Burkina Faso, cuando conseguí el vídeo de la película YEELEN , que me causó una impresión hermosa y que los burkinés no se cansaban de admirar. A partir de entonces consideré a Cisé como uno de los maestros del cine africano. Este filme, producido en 1987, narra el viaje de un joven poseedor de poderes mágicos, que busca a su tío, para que le ayude a neutralizar a su padre, que es hechicero y pretende aniquilarlo.


¿DONDE SE PRODUCE MÁS CINE AFRICANO?

Hoy existen dos centros mayores de producción de películas en África: Nigeria y Suráfrica. En 1972, Ola Balogem comienza a adaptar al cine piezas de teatro de la cultura Yoruba, dando origen a una industria que produce más de 600 millones de dólares al año. Los nigerianos producen más de 1000 títulos (en vídeos) anuales, para la pequeña pantalla y están llegando al nivel de Bollywood, industria del cine de la India, que lidera la producción mundial.

Estos filmes mezclan el amor, la acción y los hechizos, ingredientes de la vida real, que atrae a un público numeroso. Este sistema de producción de Nigeria, se conoce por Nollywood. Gana sigue este mismo camino deNigeria.

Mientras que Suráfrica se diferencia, produciendo unas películas comerciales inspiradas en las norteamericanas, como referencia al estilo de Hollywood. Explota la diversidad y la belleza de sus escenarios naturales y el costo de producción bajo. El filme Tsotsi, la historia de un joven delincuente de Johannesburgo, ganó el Oscar al mejor filme de lengua extranjera en 2006.

DOLENCIAS DEL CINE INDEPENDIENTE AFRICANO

En primer lugar, la dependencia económica de los inversores extranjeros, además, la falta de circuitos de distribución y de salas de cinema, fuera de las grandes urbes. Ante estas carencias muchos filmes africanos sólo hacen ‘la ruta de los festivales’, que tiene cuatro grandes manifestaciones continentales:

El FESPACO de Uagadugú, Burkina Faso, que desde 1969 se celebra cada dos años con regularidad ejemplar.

El ZIFF de la isla de Zanzibar, en Tanzania.

El CAPE TOWN WORLD CINEMA FESTIVAL en Suráfrica.

El LUXOR AFRICAN FILMS FESTIVAL en Egipto.

Muchas salas de espectáculos van siendo transformadas en almacenes, clubes nocturnos y hasta en iglesias evangélicas o pentecostales. Los dos únicos países, que han conservado sus salas de cine, como formando parte de su cultura, son Kenia y Suráfrica.

CONCLUSIÓN

Zezé Gamboa, director de cine, nacido en Angola afirma: “En Angola, como en el resto de África, existen muchas personas analfabetas, que no pueden leer libros, pero que comprenden y captan las historias que narran las películas, sobre todo si hablan su lengua y contemplan imágenes de su vida real.

De este modo el cine es un medio de desarrollo poderoso. El lenguaje de las imágenes lo entienden y el precio es asequible gracias a los DVD’s pirateados, vendidos en todos los mercados.”

Autor

  • Molina Molina, Antonio José

    Antonio José Molina Molina nació en Murcia en 1932. Desde 1955 es Misionero de África, Padre Blanco, y ya desde antes ha estado trabajando en, por y para África. Apasionado de la radio, como él relata en sus crónicas desde sus primeros pasos en el continente africano, "siempre tuve una radio pequeña en mi mochila para escuchar las noticias". Durante septiembre 2002, regresa a Madrid como colaborador del CIDAF. En octubre de 2005 aceptó los cargos de secretario general de la Fundación Sur y director de su departamento África. Antonio Molina pertenece -como él mismo dice- a la "brigada volante de los Misioneros de África", siempre con la maleta preparada... mientras el cuerpo aguante.

Más artículos de Molina Molina, Antonio José