Estados Unidos declaró el día 22 de julio que suspendía su ayuda militar a Ruanda, debido a la profunda preocupación por las pruebas de que está apoyando un motín en la vecina República Democrática del Congo.
Una portavoz del departamento de Estado, Darby Holladay dijo que Washington ha decidido que “no puede seguir dando financiación militar a Ruanda en el actual año fiscal”.
“El gobierno de Estados Unidos está profundamente preocupado por las pruebas de que Ruanda está implicada en la provisión de apoyo a los grupos rebeldes congoleños, incluido el M23”, declaró Holladay en un comunicado enviado por e-mail a la AFP.
El M23 son ex rebeldes tutsi, del también respaldado por el gobierno de Ruanda el Congreso Nacional para la Defensa del Pueblo, CNDP.
Estos rebeldes ruandeses fueron integrados en el ejército regular de la RDC en 2009, como parte de un acuerdo de paz que siguió a una ofensiva fallida en la ciudad de Goma, al este de la RDC.
Pero el motín que comenzó el pasado mes de abril dice demandar mejor salario y la completa implementación del acuerdo de paz firmado el 23 de marzo de 2009, por el cual fueron integrados en las fuerzas armadas de la RDC. Los amotinados se han enfrentado al ejército regular en la región este del país, Kivu norte y Kivu Sur.
Kinshasa acusa a Kigali de mantener esta rebelión, una queja respaldada por un panel de la ONU que dijo en un informe hecho público en junio, que Ruanda abastecía incluso de rebeldes, reclutados en Ruanda a la fuerza.
Halladay dice que Estados Unidos ha estado comprometido de forma activa a los niveles más altos para pedir a Ruanda que deje de apoyar a los rebeldes del M23, que “amenaza con minar la estabilidad en la región”.
“La mejor oportunidad para Ruanda y la RDC es la restricción, el diálogo y el respeto por la soberanía del otro, con el apoyo de sus socios, para retomar el difícil trabajo de llevar la paz y la seguridad a toda la región”, explicó Holladay.
Unos fondos de 200.000 dólares, que iban a ser destinados a la academia de suboficiales en Ruanda, declaró la portavoz, serán destinados ahora a otro país.
(Times Live, Suráfrica, 23-07-12)
