La embajadora estadounidense a las Naciones Unidas (ONU), Linda Thomas-Greenfield, afirmó el jueves 12 de septiembre que Estados Unidos apoyará la creación de dos asientos permanentes en el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas (UNSC) para los estados africanos y un asiento rotatorio para pequeños estados insulares en desarrollo. El apoyo a esta iniciativa coincide con un contexto en el cual Estados Unidos busca reparar sus relaciones con diversos países africanos, donde hay un descontento con el apoyo de Washington a la guerra de Israel en Gaza, además de buscar profundizar las relaciones con las naciones de las islas del Pacífico, esenciales para su objetivo de contrarrestar la influencia china en la región. La presión para obtener estos nuevos asientos se suma al apoyo prolongado del gobierno estadounidense para que India, Japón y Alemania también obtengan asientos permanentes en el consejo.
Cabe recalcar que Washington no apoya la expansión del poder de veto más allá de los cinco países que ya lo tienen. Rusia, China, Francia, Estados Unidos y Gran Bretaña son los miembros permanentes del Consejo de Seguridad desde su fundación en 1945. Inicialmente, el Consejo contaba con 11 miembros rotativos, pero desde 1965 son 10 estados los cuales son elegidos por la Asamblea General para un mandato de dos años. El secretario general de la ONU, Antonio Guterres, respalda la reforma del Consejo de Seguridad. Para que este cambio pueda tener efecto se debe realizar una modificación a la Carta Fundacional de las Naciones Unidas, la cual necesita la aprobación y ratificación de dos tercios de la Asamblea General, así como el apoyo de los cinco países con veto en el UNSC.
Autora: Michelle Nichols
Fuente: Reuters
[Traducción y edición: Micaela Llona Bavestrello]
[CIDAF-UCM]
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