Los restos del Padre John Ssenyondo, de 55 años y nativo de Uganda, fueron hallados en un poblado llamado Ocotilán en el Estado de Guerrero, al sur de México. Junto al sacerdote se encontraban los restos de otras doce personas asesinadas. Los restos se encontraron por los grupos de búsqueda de los 43 estudiantes de magisaterio de Iguala desaparecidos.
Ssenyondo, perteneciente a los Misioneros Combonianos del Corazón de Jesús, fue secuestrado el 30 de abril cuando acudió en su vehículo a celebrar misa a Santa Cruz, una pequeña comunidad en el municipio de Nejapa del que era párroco, informó Víctor Aguilar vicario general de la diócesis de Chilpancingo-Chilapa, en Guerrero.
Según algunas fuentes el padre Ssenyondo fue llevado por unos hombres armados poco después de haberse negado a bautizar a un niño de la sierra, presuntamente hijo de un delincuente.
La embajada de Uganda se hará cargo de la repatriación de los restos de Ssenyondo a su país de origen.
Fundación Sur