El 13 de febrero de cada año, celebramos la radio, el primer y más influyente sistema de comunicación masiva del mundo.
Este año, bajo el lema «Radio y Cambio Climático«, en Farm Radio International nos sentimos más conectados que nunca con su papel vital.
A medida que el clima continúa empeorando, los fenómenos meteorológicos extremos se están convirtiendo en la norma y las personas de todo el mundo luchan por adaptarse. Los desastres naturales han aumentado constantemente, lo que refuerza la importancia de tener acceso a fuentes de noticias confiables. En tiempos de crisis e inestabilidad climática, la radio es un aliado de primera línea.
Si bien existen métodos de comunicación más modernos, la radio llega de forma fiable a las audiencias más numerosas, pudiendo funcionar sin electricidad, internet ni acceso satelital.
Cuando todo lo demás falla, la radio perdura
En Farm Radio, hemos visto de primera mano que las comunidades rurales se encuentran entre las más vulnerables al cambio climático y, a menudo, las más difíciles de alcanzar. Ya sea en las aldeas agrícolas de Ghana o en la zona rural de Saskatoon, la radio sigue siendo un recurso vital para llegar a nuestras comunidades más alejadas en todo el mundo y difundir información vital sobre cómo afrontar el cambio climático.
Como comunicadores, reconocemos el poder de la radio como un medio estable y fiable en tiempos de incertidumbre. Con las condiciones climáticas en constante fluctuación, los agricultores y quienes dependen de la tierra deben adaptarse rápidamente. Lo que funcionaba hace una década puede que ya no lo sea, lo que requiere compartir nuevos conocimientos.
Hemos detectado esta brecha y hemos trabajado para abordarla mediante la radiodifusión y la radio. A través de nuestro proyecto sobre soluciones naturales al cambio climático, hemos estado capacitando a locutores africanos en la producción de documentales de radio para que puedan compartir las soluciones climáticas de las comunidades en todo el continente.
Además de este proyecto, hemos creado un podcast llamado Nature Answers, donde compartimos las historias y el conocimiento de las comunidades rurales africanas que han encontrado soluciones únicas para afrontar un clima cambiante.
Hoy, para celebrar el papel vital de la radio en la lucha contra el cambio climático, veamos cinco soluciones impactantes que las comunidades africanas han descubierto para abordar este desafío global.
#1 – Cómo los árboles de teca inducen la lluvia
Con sus imponentes copas y su capacidad para absorber dióxido de carbono, los árboles han contribuido a la producción de lluvias fiables para los agricultores rurales de Ghana. Un árbol de teca adulto protege el suelo del sol implacable de la estación seca, convirtiendo el suelo del bosque en un hábitat rico en nutrientes para otras plantas.
#2 – Excavando pozos en épocas de sequía
Dimtsi Weyane Tigray, locutor de radio que trabaja en Etiopía, enseñó a sus oyentes cómo excavar pozos poco profundos para captar agua de lluvia en épocas de sequía, ayudando a los agricultores a aliviar sus preocupaciones sobre el suministro de agua tanto para sus cultivos como para su ganado.
#3 – Los mangos como el mejor escudo contra el viento
El tronco grueso y las ramas anchas de los mangos proporcionan una excelente defensa contra la intensificación de las tormentas de viento causadas por el cambio climático. Plantar mangos alrededor de casas y tierras de cultivo previene la erosión y protege las viviendas de las comunidades circundantes.
#4 – Cómo la piscicultura puede restaurar los humedales
Una comunidad de la parroquia de Artwotngo, en el norte de Uganda, utiliza una piscifactoría sostenible para recuperar su comunidad, tanto ambiental como económicamente, tras la guerra civil. Mediante el cultivo de tilapia y bagre, equilibran la acuicultura, la restauración de humedales y las prácticas agrícolas sostenibles.
#5 – Los anacardos pueden mejorar la producción de maíz
En la región de Bono East, Ghana, las lluvias eran irregulares y las temperaturas subían. El suelo donde se cultivaba maíz se había vuelto infértil y los cultivos no obtenían el rendimiento adecuado. Tras plantar anacardos entre las hileras de maíz, las raíces de los árboles comenzaron a nutrir el suelo y la producción de maíz aumentó.
Fuente: Farm Radio International
[CIDAF-UCM]


