La ONU ha advertido que cerca de 200.000 refugiados civiles en campamentos de la ONU en Sudán del Sur están en extremo peligro, debido a la presencia de elementos armados entre ellos.
La advertencia se produce pocos días después de la matanza de civiles en los campamentos de la ONU en los estados del Alto Nilo y de Bahr Algazal.
El Representante Especial Adjunto de la Misión de las Naciones Unidas en Sudán del Sur (UNMISS), Moustapha Soumare, señaló ante el Consejo de Seguridad de la ONU el lunes, que la violencia contra los civiles en los campos de Protección de las Naciones Unidas de Sudán del Sur, se ha exacerbado por la presencia de elementos armados entre los civiles poniendo en peligro la estabilidad de los campamentos. También señaló que las tropas de la ONU aumentaron sus patrullas en estos sitios protegidos, para asegurar las áreas circundantes.
«La situación en el oeste de Bahr el Ghazal, sobretodo alrededor de la ciudad de Wau, también ha empeorado en las últimas 48 horas».
Unos 18 civiles murieron en los enfrentamientos del estado del Alto Nilo, la semana pasada entre las tribus Shuluk y Dinka.
El gobierno ha negado cualquier implicación de sus tropas en estos actos de violencia.
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