“Aquí no se trata de ver quién gana, sino quién sirve. Si estamos a ver quién gana, pierden los más pobres”, claman los cardenales Omella y Osoro, quienes apuestan juntos, por un pacto entre todos los partidos políticos, estamentos sociales y económicos para salir juntos de la crisis«. Esto es necesario, tanto en Europa, como en África.
La calidad de liderazgo y la responsabilidad de gestión se miden precisamente en la capacidad de diálogo honesto y de consenso para un compromiso cooperativo, con el objetivo de primar la salud de la ciudadanía y un desarrollo sostenible, para los que habitan el país y para los pueblos más necesitados del hemisferio sur.
Los líderes que no sean hoy capaces de dialogar y trabajar juntos, deberían dimitir por ética profesional. Como esto puede ser más bien una utopía, somos nosotros los ciudadanos, los que tenemos la responsabilidad de elegir mejor a nuestros representantes y gestores de los bienes comunes.
La crisis global de liderazgo competente y responsable, nos afecta en todos los países. Esta evidencia, puede significar una nueva oportunidad, para que la sociedad tome de nuevo su protagonismo en elegir líderes más íntegros.
«El ingreso mínimo vital hay que asegurarlo», afirma el presidente de la Conferencia Episcopal en un desayuno ‘virtual’ con el Nueva Economía Fórum.
Toda la enseñanza social del Evangelio, se basa en cuidar la dignidad de cada persona y en trabajar por el bien común, por solidaridad.
La fe auténtica hace justicia y se cuida de las personas más empobrecidas, así como de todo el Planeta.
Existe una actitud bastante generalizada en la sociedad actual, que consiste en seguir diferentes ideologías, sean religiosas, políticas o económicas, de forma radical, y por tanto buscando imponerlas a los demás y excluir a los que piensan y son diferentes.
Así construimos muros, vallas, partidos, grupos radicales, etiquetas, y hacemos imposible cualquier diálogo real y toda colaboración constructiva.
Saber valorar las cualidades de los demás, al mismo tiempo que aceptamos sus peculiaridades y hasta manías, es algo fundamental para la convivencia.
La madurez y sabiduría de una persona, líder y sociedad, se mide por su capacidad de respetar y dialogar con los demás, para trabajar juntos por el bien común. Un buen ejemplo de liderazgo, es el Documento de Fraternidad Humana, firmado por el papa y el gran imán de Al Azhar.
La nueva forma de gobernanza, de gestión y de economía, es y debe ser esencialmente ética y colaborativa. Por tanto, los que piensen y actúen, como “partidos” y “clases sociales”, no están capacitados para una responsabilidad común, donde todos deben estar y sentirse integrados.
Hoy día 25 de mayo, es el Día de África. Deseamos y colaboramos para que tanto los gobernantes africanos y mundiales, como todos los pueblos africanos, sean los protagonistas de su desarrollo sostenible y ecológico, gracias a su sabiduría ancestral, su juventud bien educada y a sus abundantes recursos naturales.