Senegal se encuentra en una profunda crisis política tras el intento del presidente, Macky Sall, de posponer las elecciones del 25 de febrero hasta diciembre, pese a que posteriormente el Consejo Constitucional de Senegal dejara sin efecto el aplazamiento de las elecciones. Ahora, un panel de diálogo nacional ha propuesto una solución alternativa al sugerir que las elecciones se celebren a principios de junio, marcando la primera propuesta de este tipo desde el intento presidencial frustrado de aplazamiento.
A pesar de que Sall ha prometido dejar el cargo antes del 2 de abril, final de su mandato actual, persiste la incertidumbre sobre quién asumirá el cargo si las elecciones no se realizan antes. El retraso de las elecciones ha desencadenado protestas violentas en todo Senegal, perturbando su reputación como una democracia estable en una región plagada de golpes de Estado.
El panel ha instado al Consejo Constitucional a reconsiderar sus decisiones que impidieron la participación de ciertos candidatos, incluido Karim Wade, líder de la oposición e hijo del expresidente Abdoulaye Wade. A pesar de defender su decisión de posponer las elecciones, el presidente Sall ha aceptado el fallo del Consejo Constitucional y ha tratado de calmar la situación, proponiendo incluso una ley de amnistía general para abordar las protestas, aunque se desconoce si ésta incluiría a la figura de Ousmane Sonko, principal opositor al gobierno actual.
Fuente AlJazeera
[Traducción y edición: Bruno Rodríguez]
[CIDAF-UCM]