A raíz del encuentro entre los países africanos y Estados Unidos, que tuvo lugar el pasado 14 de diciembre, se ha puesto en evidencia de nuevo la falta de reconocimiento internacional que sufren los países como Somalilandia. Esto ha despertado el eterno debate de cómo tiene que orientarse la política exterior para conseguir el reconocimiento que se lleva buscando casi 30 años.
La política exterior se ha basado en la promoción de los valores democráticos del país y destacando sus instituciones; aunque en los últimos años esta percepción de libertad política se ha visto dañada por las últimas elecciones que generaron disputas políticas internas y la detención de periodistas y líderes de la oposición. Pese a esto último, el país ha conseguido avances en la esfera internacional este año como las visitas de su presidente, Musa Bihi Abdi, a Reino Unido y Estados Unidos o la firma de tratados de asociación con esta última nación. No obstante, Somalilandia sigue estando ausente en los principales actos internacionales y está limitada a unas relaciones bilaterales con Estados que no la reconocen.
Ante estos hechos, Somalilandia está realizado un cambio en su política exterior para concentrar su acción política en el entorno africano. Esto implica que el caso del reconocimiento internacional pasaría a ser directamente responsabilidad de la Unión Africana. Sobre todo, porque aun teniendo importancia el respaldo internacional de los países occidentales, Somalilandia puede llegar a tener más peso en el entorno africano y sus instituciones regionales.
Este cambio de vía no implica un camino más fácil, ya que en algunos aspectos la africanización de la política exterior de Somalilandia supone nuevos retos. Teniendo en cuenta el pasado colonial del continente africano, así como sus diferentes contextos históricos, sociales y políticos, las naciones son muy sensibles a los cambios en los países de la región. Un entorno que inevitablemente sufrirá los cambios del reconocimiento de Somalilandia simplemente por su cercanía geográfica, aunque podrían servir para una mejor interconexión y para el estrechamiento de los lazos cooperativos entre países. Los principales objetivos de Somalilandia deberían ser aquellas naciones con más influencia y poder sobre el resto del continente y también en sus instituciones regionales. Esto implicaría establecer relaciones diplomáticas formales con Sudáfrica, Nigeria, Ruanda o Ghana.
Por último, es importante que a la vez que la africanización, se produzca una diversificación del discurso político de cara al escenario internacional. A parte de enfatizar en la idea de la democracia y un Estado institucionalizado, se debería incidir en la promoción de las oportunidades económicas y productivas que disfruta Somalilandia para hacer más atractiva la posibilidad de cooperación y reconocimiento.
Moustafa Ahmad – @Moustafe_Ahmad
Fuente: Addis Standard
[Traducción y edición, Celia Amador Chamorro]
[CIDAF-UCM]