El arzobispo Miguel Ángel Ayuso, voz autorizada del diálogo interreligioso de la Iglesia católica, ha defendido en rueda de prensa que la Iglesia quiere tender puentes -no muros- entre las religiones, y ha subrayado el papel esencial de los misioneros como agentes de este diálogo. Después de condenar reiteradamente los atentados terroristas del fundamentalismo islámico, ha defendido el papel de las religiones para construir la convivencia en un estado laico. Encargado de la conferencia de apertura, monseñor Ayuso inaugura esta tarde la Semana de Misionología de Burgos, el evento académico sobre la Misión con más solera de España, que este año cumple 69 años y que reflexionará en esta edición sobre el diálogo interreligioso.
El diálogo interreligioso está de «rabiosa actualidad». Así lo ha defendido monseñor Miguel Ángel Ayuso, una de las máximas autoridades del Vaticano sobre el tema, en la rueda de prensa de presentación de la 69 Semana de Misionología de Burgos. Según ha explicado, ante una humanidad herida el diálogo se descubre como esencial para la construcción de la convivencia y la defensa de los derechos esenciales del hombre. Este diálogo busca la colaboración «del uno al lado del otro, no enfrente del otro». Siempre desde la identidad de cada uno, para así evitar el sincretismo y el relativismo. «Hoy necesitamos construir un Estado laico, donde las religiones puedan colaborar en la construcción de un mundo mejor».
«El principal obstáculo para el diálogo interreligioso es el miedo», ha afirmado monseñor Ayuso, quien ha condenado en varias ocasiones los atentados fruto del fundamentalismo. Asimismo, ha animado a saber distinguir entre las comunidades de creyentes y el «activismo de personas que manipulan la religión y la utilizan para otros fines». Ante esto, la Iglesia propone la educación en el conocimiento de los demás, su reconocimiento, y la colaboración con ellos. De hecho, según ha explicado, el Papa Francisco -en la línea de sus predecesores-, ha tendido la mano en varias ocasiones a todas las religiones para trabajar juntos por la paz y rezar cada uno desde su propia tradición para que cese la violencia.
Francisco Pérez Herrero, presidente de la Facultad de Teología del Norte de España, anfitriona de la Semana, ha explicado que el diálogo no sólo responde a la necesidad de convivencia entre los pueblos, sino que está en la raíz del cristianismo: nace de un Dios que se revela y entra en diálogo con el hombre. «La Iglesia no puede excluir el diálogo interreligioso, la fe no es un obstáculo, sino que es un impulso para el diálogo». Como ejemplo paradigmático de este diálogo, Pérez Herrero ha recurrido al pasaje de la samaritana, en el que Jesús conversa con una mujer que era considerada infiel por el pueblo judío.
Anastasio Gil, director nacional de Obras Misionales Pontificias, ha presentado el programa de la 69 Semana de Misionología que se inaugura esta tarde, y ha destacado que la ponencias inaugural -pronunciada por monseñor Ayuso esta tarde- y de clausura -de la mano de Jaime Rosell Granados, subdirector general de Relaciones con las Confesiones del Ministerio de Justicia, que tendrá lugar el miércoles-, van de la mano: tratarán la cuestión del diálogo interreligioso desde el punto de vista de la Iglesia, y desde el punto de vista del Estado. Además, ha explicado que las mesas redondas y las conferencias de la Semana abordarán específicamente el diálogo del cristianismo con el budismo, el hinduismo, el islam, el judaísmo y los pueblos indígenas. Por último, ha subrayado que uno de los más importantes agentes de este diálogo interreligioso son los misioneros, quienes viven en su carne esta conversación cotidiana con las otras religiones, y que tendrán protagonismo en la Semana.
Puede ver el programa completo de la 69 Semana de Misionología de Burgos en:
http://www.omp.es/omp/formacion/cursos/69semanamisionologia.pdf
OMP
(Fundación Sur)
