El primer ministro turco, Recep Tayyip Erdogan, ha recibido, el día 29 de noviembre por la tarde, en la capital de Libia, Trípoli, el Premio Internacional Gadafi de Derechos Humanos, 2010, otorgado en reconocimiento a su apoyo a la causa del pueblo palestino, su combate a favor de los pobres y por su esfuerzo por la promoción del respeto de los derechos de los pueblos y de sus culturas.
En un discurso pronunciado durante el transcurso de una ceremonia organizada en presencia de los más altos responsables libios, los miembros del comité del premio Gadafi y del cuerpo diplomático acreditado en Libia, el primer ministro Erdogan indicó que este premio contribuirá enormemente al acercamiento entre los pueblos turco y libio.
El primer ministro turco se ha referido a la ausencia de legalidad internacional, que, según él, marca el tratamiento de las cuestiones humanitarias en todo el mundo y al drama del pueblo palestino en general y al sufrimiento de los niños palestinos en Gaza, víctimas de las masacres planificadas y perpetradas con las armas más sofisticadas, afirmando que no podemos permanecer en silencio ante estas muertes, “ni ante la piratería en el Mediterránea”, haciendo alusión a la operación militar de las fuerzas especiales israelíes contra la Flotilla de la Libertad, en la que resultaron muertas nueve personas y docenas de heridos.
Además ha condenado enérgicamente las campañas de difamación contra el Islam y los musulmanes en todo el mundo, calificando el “fenómeno de islamofobia” como crimen contra la humanidad.
El Premio Internacional Gadafi a los Derechos Humanos que consiste en 250.000 dólares americanos, fue fundado en 1988 para recompensar a las personalidades y organizaciones que tienen un rol importante en la esfera de los derechos humanos. Fue concedido por primera vez en 1989 a Nelson Mandela, mientras era militante de la lucha antiapartheid en Suráfrica.
Además se ha concedido a los niños de la intifada palestina, en 1990; a los indios americanos, en 1991; a los niños víctimas de la guerra en Bosnia, en 1993; a Fidel Castro, en 1998; a los niños víctimas del embargo en Irak, en 1999; a Hugo Chávez, en 2004 y a Daniel Ortega, en 2009.
(Afrique en Ligne, 30-11-10)