Activistas de defensa de los derechos de los niños han elogiado al presidente Bingu wa Mutharika por su decisión de retener una polémica reforma constitucional que propone que la edad de matrimonio para las niñas sea de 16 años. [En la actualidad está establecida en los 15, con el consentimiento de los padres. La sociedad civil ha presionado al gobierno para que lo aumente a los 18 como establece la convención de derechos de los niños de la ONU, de la que Malaui es signatario].
Los activistas han felicitado al presidente Mutharika en diferentes intervenciones públicas porque ha demostrado ser un líder experto y tolerante para disentir de otros puntos de vista y tener en cuenta el bienestar de los niños. “Hemos recibido la noticia de la decisión del presidente con alegría”, aseguraba MacBain Mkandawire, director de Yoneco, Red de Juventud u orientación.
El portavoz del Parlamento, Henry Chimunthu Banda, anunció la semana pasada en un comunicado que el presidente había retenido el proyecto de ley para permitir que se realizasen más consultas durante la próxima sesión parlamentaria. “Es una lección para los malauianos que cuando se formulan los proyectos de ley, todos debemos tomar parte en ello. Los miembros del Parlamento y el ministerio de Justicia deberían también hacer consultas generalizadas antes de presentar un proyecto”, aclaró.
Esta visión es compartida por Maxwell Matewere, director ejecutivo de la ONG Eye for Children, que felicitó al presidente por la decisión. “Estamos agradecidos al presidente por tener en cuenta a los niños y a mucha gente de este país”.
Matewere pidió a los parlamentarios que consulten a los electores y a las ONG antes de acudir al parlamento, argumentando que en las democracias representativas, las consultas son cruciales.
El Centro para Derechos Humanos y Rehabilitación, también recibió con agrado la noticia, “Aplaudimos al presidente por tomar esta decisión tan importante”.
Las actuales estadísticas indican que la mortalidad maternal en Malaui es de 1.000 de cada 100.000 nacimientos, una de las peores de todo el mundo. “Para un país que ya lucha contra los matrimonios tempranos y la alta mortalidad maternal, no tiene sentido aprobar leyes que no harán sino empeorar las cosas”, señaló otro defensor de los derechos de los niños.
Anteriormente, más de 15 organizaciones de defensa de los derechos de los niños habían pedido al presidente que no diese su visto bueno a este proyecto de ley.
(The Daily Times, Malaui, 09-09-09)