El presidente de Kenia, Mwai Kibaki, levantó el día 14 de febrero la suspensión de dos ministros del gobierno que había impuesto previamente el primer ministro, Raila Odinga, calificando las destituciones de ilegales.
El señor Odinga había anunciado antes, citando el acuerdo nacional y la constitución que le da poder para supervisar los ministros, que suspendía a dos, cuyos ministerios se han visto involucrados en escándalos de corrupción, para despejar el camino a las investigaciones. La suspensión iba a durar tres meses.
Quitar a ministros
Pero el presidente Kibaki dijo después que Odinga no tenía poder para quitar ministros y la suspensión no se había hecho de acuerdo con la constitución.
“Las provisiones legales sobre las que actuó el primer ministro no le confieren autoridad para hacer que un ministro o ministra abandone su cargo”, dijo Kibaki, añadiendo que “la guerra contra la corrupción tendrá éxito cuando lo hagamos de acuerdo con la constitución y dentro de los procesos legales”.
Pewguntado por los periodistas si había consultado al presidente, Odinga respondió, “Si, los requisitos de consultas dentro del gobierno se han cumplido. Esto es una decisión del gobierno y también he citado la sección en la constitución y el acuerdo nacional que me da poder para tomar las medidas que he tomado”.
Kibaki, en su comunicado asegura que a él no se le ha consultado nada, citado también el acuerdo nacional y la constitución, donde dice que los ministros sólo pueden ser destituidos por el presidente y después de haber consultado.
Los ministros suspendidos, el profesor Sam Ongeri, de Educación y Willian Ruto, de Agricultura, rechazaron su suspensión alegando que sólo el presidente podía despedirles. El día 14 de febrero, Odinga había dicho que para que el gobierno llevase a cabo investigaciones justas, independientes y exhaustivas, los dos ministros deberían abandonar su cargo.
Recogida de pruebas
“El resultado de esta decisión será la recopilación de pruebas para determinar si alguna persona ha de ser procesada por los dos escándalos”, señaló el primer ministro Odinga, quien añadió que las dos auditorías externas realizadas por PriceWaterHouseCoopers sobre el escándalo del maíz y la auditoría interna sobre el informe general de la Educación Primaria, dan fundamentos creíbles para investigar a los dos ministros.
En una rápida respuesta, el profesor Ongeri señaló “No he recibido ninguna comunicación de la autoridad nominadora. Tengo muy claro quién es la autoridad nominadora”.
Kibaki dijo que su postura contra el estatus de los dos ministros no debe ser interpretada como que ha abandonado la guerra contra la corrupción, por tanto “constitucionalmente, los dos ministros permanecen en sus cargos”, explicó el presidente.
El día 13 de febrero, el presidente Kibaki anunció que ochos funcionarios públicos iban a abandonar su cargo por estar relacionados con escándalos de corrupción. En el escándalo de la educación estaban involucrados en el fraude altos funcionarios del ministerio, según la comisión anticorrupción de Kenia, que cobraron adelantos inflados para la celebración de seminarios.
En el otro escándalo, el maíz de los almacenes estratégicos era vendido a los especuladores que ganaban millones de chelines mientras que los consumidores sufrían los altos precios y el gobierno perdía alrededor de 2.000 millones de chelines. También se incumplieron las regulaciones de adquisición en la importación de dicho maíz.
Se produjeron protestas callejeras en Eldoret, Kapsabet y Nandi Hills, contra la suspensión de Ruto. Por su parte, Ongeri, retrasó una rueda de prensa que había convocado a las 3 de la tarde, para consultar con sus ayudantes durante una hora.
Cuando finalmente salió para hablar con los periodistas que esperaban, Ongeri empezó diciendo alegremente que no estaba en estado de shock.
La sección 4 (1) del Acuerdo Nacional, citada por Odinga, dice que el primer ministro tendrá autoridad para coordinar y supervisar la ejecución de las funciones y asuntos del gobierno de Kenia, incluido la de los ministros.
Además dice que el primer ministro puede asignar cualquiera de las responsabilidades de coordinación de su oficina al vice primer ministro y que también debe cumplir otros deberes asignados a él por el presidente y por cualquier ley escrita”.
La sección 15 A de la constitución por otro lado establece el gobierno de coalición y crea la oficina del primer ministro, sus ayudantes y ministros. Las dos secciones, sin embargo, no dan poderes al primer ministro categóricamente para suspender a ministros, dejando el asuntos a merced de interpretaciones.
(Daily Nation, Kenia, 15-02-10)