02 de enero 2011 (Jartum) – El principal partido de la oposición en Sudán, el Partido Popular del Congreso (PCP) dirigido por el veterano islamista Hassan Al-Turabi ha amenazado con trabajar para derrocar el Gobierno del Partido Nacional del Congreso (NCP), si éste continúa rechazando todas sus demandas de reformas y la creación de un gobierno de transición.
El ultimátum fue anunciado en una conferencia de prensa celebrada en Jartum el domingo por el secretario de Exteriores del PCP, Bashir Adam Rahmah, quien declaró que en la reunión del comité de dirección del partido se había aprobado la búsqueda de un cambio de régimen si el gobierno continúa resistiéndose a sus peticiones de reformas económicas, políticas y judiciales.
El PCP es un partido surgido como fractura del NCP por el disidente Al-Turabi, cuando este se enfrentó con su antiguo compañero, el actual Presidente de Sudán (Al-Bashir) en 1999. El partido de oposición es ahora el más sonoro en la lucha contra el PNC del Presidente Al-Bashir.
La tensión política en Sudán crece por momentos al acercarse la votación crucial en el Referéndum sobre la independencia de la hasta ahora región semiautónoma Sur-Sudán. Los partidos de oposición acusan al PNC en el gobierno de ser el único responsable de la separación inminente del Sur y le exigen que acepte su demanda de formar un gobierno de transición y lleve a cabo reformas constitucionales.
El día 31 de diciembre, viernes, el Presidente Al-Bashir invitó a los partidos de oposición a unirse a su Gobierno para afrontar este deslizarse del país hacia la inevitable ruptura como resultado de la votación del Sur de Sudán el 9 de enero. Dijo que esta adhesión a su gobierno crearía un «frente interno unido».
Pero Rahmah (oposición, PCP) consideró ridícula la llamada de Al-Bashir por ser como «una invitación a la galería, para consumo político”. Rahmah añadió que el gobierno ha perdido toda legitimidad jurídica, política y moral advirtiendo además al partido en el poder que cualquier respuesta violenta a las actividades de la oposición le costaría muy caro.
«Asumimos que el PNC no va a desplegar la alfombra roja ante nuestras demandas, pero el Partido en el gobierno debe entender a su vez que si se responde a ellas con violencia causará un baño de sangre en las calles», advirtió.
Sin embargo, el NCP (Gobierno) ha despreciado las amenazas del partido de la oposición, diciendo que son “las de siempre, nada nuevo» en palabras de su Secretario de las relaciones políticas, Ibrahim Gandur.
Gandur (NCP, gobierno) ha acusado además a los partidos de la oposición de tratar de incitar a la sedición y querer desestabilizar la situación política mediante su búsqueda de un cambio de régimen.
Las elecciones generales de abril en Sudán estuvieron marcadas por las denuncias de fraude masivo y la manipulación de los votos. En ellas fue reelegido el actual Presidente Al-Bashir y su partido con una mayoría abrumadora en el parlamento.
(Sudan Tribune, 02-01-11)
Traducción de Santiago Izco Esteban.
