El Papa Francisco reaccionó al reciente bombardeo mortal de un centro de detención de migrantes en Libia e hizo un llamamiento a la organización de corredores humanitarios para ayudar a los migrantes ‘más necesitados’. El Papa aseguró, después de la tradicional oración del Ángelus en la Plaza de San Pedro, que «la comunidad internacional no puede tolerar acontecimientos tan graves», .

El Pontífice argentino, que ha hecho de la defensa de los migrantes uno de los ejes principales de su pontificado, también hizo un llamamiento a los fieles para que «oren por los pobres indefensos que murieron o resultaron heridos el martes en el ataque aéreo que afectó a un centro de detención de migrantes en Libia».

Después de que 44 migrantes murieran en un ataque aéreo, el martes por la noche, contra su centro en Tajoura, un suburbio oriental de Trípoli, unos 300 migrantes siguen retenidos allí, según la Organización Internacional para las Migraciones (OIM). El centro de detención afectado por el ataque albergaba a unos 600 migrantes, en su mayoría eritreos y sudaneses, y dos de sus cinco hangares resultaron afectados, según el director del centro, Noureddine al-Grifi. Unos 120 migrantes se encontraban en el hangar nº 3.

Fuente: Slate Afrique

[Traducción y edición, Carmen Moreno García]

[Fundación Sur]

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