El Movimiento Democrático de Mozambique (MDM), tercera fuerza política del país, criticó la guerra de palabras que sostienen hoy el presidente Filipe Nyusi y el líder del principal partido opositor, Renamo, Afonso Dhlakama.
Nyusi y Dhlakama tienen un discurso incoherente, al decir que están dispuestos al diálogo, pero luego en la práctica mantienen una guerra de palabras a una distancia que dañan la paz y los éxitos del pueblo mozambiqueño, dijo el líder del MDM, Daviz Simango.
Según Sande Carmona, portavoz de esa organización política, cualquier situación de diferencia de pensamiento, de manera de estar, debería pasar necesariamente por una conversación, por un diálogo permanente y constante en el que estén todas las fuerzas vivas de Mozambique.
Consideró que hay mucha falta de inteligencia en el liderazgo de la Resistencia Nacional Mozambiqueña (Renamo).
Esta semana Nyusi reiteró su voluntad de reunirse con Dhlakama y consideró que la paz presupone una conciliación de ideas.
«Estamos seguros de que nuestro hermano (Dhlakama) también anhela la paz y esto nos da la esperanza de que él también hará todo para que los mozambiqueños se puedan beneficiar de este don precioso», dijo Nyusi durante un foro nacional religioso, celebrado en la central ciudad de Quelimane, provincia de Zambézia.
Insistió en que no hay razón para derramar más sangre de los mozambiqueños. «Conocemos esa experiencia y sabemos lo cara que es», subrayó.
Reiteró que la «paz presupone una conciliación de ideas y no necesariamente la aceptación pura e incondicional de una idea».
Solo es posible alcanzar y mantener la paz, añadió, si por parte de todos nosotros tenemos una verdadera nobleza de espíritu y carácter.
Apeló a los mozambiqueños para que promuevan la tolerancia y la generosidad, virtudes esenciales para el bienestar del país.
La tensión política domina actualmente Mozambique por la aversión de la Renamo en reconocer los resultados de las últimas elecciones generales y su exigencia en gobernar en seis provincias, donde reclaman una victoria en las urnas.
Dhlakama amenaza con tomar el poder por la fuerza en las provincias de Tete, Manica, Sofala, Nampula, Zambézia y Niassa.
De igual manera rechaza la invitación de Nyusi de reunirse cara a cara para discutir la situación política y militar en el país, al alegar que el Gobierno tiene que respetar íntegramente los acuerdos de paz existentes.
Paralelamente, la Resistencia abandonó el prolongado proceso de diálogo que mantenía con el Ejecutivo sin que su principal objetivo, la desmilitarización de esa organización opositora, se haya alcanzado.
El partido gobernante Frente de Liberación de Mozambique (Frelimo) y Renamo se enfrentaron en una guerra civil, después de la independencia nacional (25 de junio de 1975), que duró 16 años.
Ambas organizaciones firmaron en 1992 el Acuerdo de Paz de Roma que puso punto final a las hostilidades y, desde entonces, el Frente gobierna esta nación.